Qué pasa si el gobierno de Trump no cumple con la reunificación de familias ordenada por una corte federal
La pregunta que muchos se hacen es qué sucederá si el gobierno de plazo fijado por una corte federal, no cumple con la totalidad de las reunificaciones de menores separados de sus padres en la frontera con México.
El pasado 26 de junio, el juez federal Dana Sabraw dictaminó que el gobierno debe reunificar cuanto antes a más de 2,500 menores arrebatados a sus padres en la frontera cuando intentaban ingresar indocumentados.
El gobierno justificó las separaciones al cumplimiento de la política de 'tolerancia cero' y tras la presentación de cargos criminales a los padres y/o familiares o adultos que acompañan a los menores.
El Departamento de Justicia (DOJ) argumenta que, por ley, los menores no deben permanecer junto a sus progenitores hasta que no concluyan sus casos en la corte criminal. Y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha indicado que los padres, una vez finalizado el proceso criminal podrán ser reunificados con sus hijos, y continuar con sus procesos migratorios de deportación, y dentro de ellos solicitar asilo.
La orden del tribunal
Pero el juez Sabraw ordenó que en un plazo de 14 días el gobierno debía reunificar a los niños menores de 5 años, y 30 días para reunificar a los mayores de 5 años. El número total de menores reconocidos por el DHS es de 2,551.
De ellos, 103 tienen menos de 5 años y el 10 de julio, cuando venció el primer plazo, el gobierno solo reunificó 58.
El martes los abogados del gobierno dijeron que habían reunificado unas 1,600 familias, pero la ACLU advirtió que la cifra “no ha sido verificada”, según dijo a Univision Noticias Esmeralda Flores, directora del programa de defensa de los derechos de inmigrantes y asuntos binacionales de la ACLU en San Diego.
Qué pasa si el gobierno no cumple
¿Y si este jueves el gobierno de Trump no cumple con el segundo plazo fijado por Sabraw? El profesor Stephen Yale-Loehr, de la Facultad de Derecho de la Universidad de Cornell, Nueva York, analiza este escenario.
"Reportes de prensa indican que es poco probable que el gobierno cumpla con ese plazo”, dijo. “De hecho, 48 horas antes de la audiencia, el gobierno aún necesitaba reunir a más de 1,500 familias”, apuntó.
Yale-Loehr agregó que “el tribunal federal tiene varias opciones” si el gobierno no cumple con la fecha límite ordenada el 26 de junio.
- El juez Sabraw podría declarar al gobierno en desacato. Sin embargo, eso no necesariamente aceleraría el proceso de reunificación.
- El tribunal podría creer en la respuesta del gobierno, de que está trabajando rápidamente y de buena fe y le dará más tiempo para reunir a las familias.
- El tribunal podría continuar con su orden temporal que prohíbe al gobierno deportar a las familias tan pronto como se reúnan.
A la pregunta de si el gobierno decide mantener retenidas a las familias que reunifique, Yale-Loehr indicó que “en este momento no hay suficientes camas en los centros de detención familiar para tenerlos a todos. Y los médicos han escrito declaraciones juradas que explican que la detención de familias puede causar un posible daño psicológico permanente”, sobre todo a los menores. “En conclusión”, apuntó, “no hay respuestas simples o buenas. El gobierno creó esta crisis separando a niños y padres sin pensar en las posibles consecuencias. Tomará a los abogados y los tribunales mucho tiempo para deshacer el daño provocado", concluyó.
Cabe destacar que, hasta el martes, 463 padres de menores separados han sido deportados solos a sus países de origen. Los niños permanecen en Estados Unidos.