El gobierno de Trump amplía el veto migratorio a otros 6 países
El gobierno de Donald Trump anunció la inclusión de 6 nuevos países al veto migratorio que impide a ciudadanos ingresar a Estados Unidos por razones de seguridad nacional.
El mandatario había anticipado la semana pasada, en la Cumbre de Davos, Suiza, que en breve anunciaría la lista.
Los nuevos países, que se suman a otras siete naciones, entre ellos funcionarios del gobierno venezolano de Nicolás Maduro, son Bielorrusia, Birmani, Eritrea, Kirguistán, Nigeria, Sudán y Tanzania. La lista había sido avanzada por el diario The Wall Street Journal.
Trump advirtió en Davos que la medida es para “asegurar” al país y “poner a salvo ”a los estadounidenses”.
La cadena CNN, citando a una fuente familiarizada con la actualización de la lista, dijo que la medida, ya ha provocado controversia sobre su objetivo previsto en varios países africanos.
La primera lista
La lista de restricción de ingresos fue publicada por primera vez en enero de 2017, pocos días después de que Trump se instalara en la Casa Blanca tras ganar la elección presidencial del año anterior.
La prohibición, conocida como BAN, fue desafiada en los tribunales, modificada y finalmente aprobada por la Corte Suprema en junio de 2018.
Hasta ahora la lista incluía a Irán, Libia, Somalia, Siria, Yemen, Venezuela (funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro) y Corea del Norte.
Los nuevos países del BAN no necesariamente enfrentarían prohibiciones generales para viajar a territorio estadounidense, pero podrían tener obstáculos sobre tipos específicos de visas, tal como de negocios o turismo, habían anticipado funcionarios conocedores del tema.
The Wall Street Journal dijo la semana pasada que, de acuerdo con funcionarios, la lista definitiva de países afectados será dada a conocer cuando el presidente haga el anuncio.
Trump tenía planeado formular el anuncio sobre la ampliación del BAN el lunes pasado, fecha que conmemoró el tercer aniversario de su gobierno. Pero fue retrasado debido a la emergencia de salubridad desataca por la epidemia del coronavirus, reportó el sitio Político.
La restricción también prohíbe a los países de la lista participar en el programa de Visas de Diversidad (DV), conocido popularmente como Lotería de Visas, que cada año sortea 50,000 residencias legales permanentes ( green cards).
El Departamento de Estado señala que cada año participan en el sorteo entre 12 y 14 millones de personas de todo el mundo.
Fallo clave
En junio del 2018 la Corte Suprema con una votación 5-4 resolvió una demanda encabezada por el estado de Hawaii, que cuestionó el veto migratorio de Trump, que en una tercera versión implementada en diciembre de 2017 restringió la entrada al país de ciudadanos procedentes de Irán, Libia, Siria, Somalia y Yemen, además de Corea del Norte y funcionarios del gobierno de Maduro en Venezuela.
Tras el dictamen, demócratas, críticos y grupos contrarios a la política migratoria de Trump dijeron sentirse “decepcionados”.
"El peligroso fallo del Tribunal Supremo socava nuestros valores, nuestra seguridad y nuestra Constitución”, dijo en esa ocasión la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (demócrata por California). “No importa cuántas veces el presidente reescriba su prohibición musulmana antiestadounidense, eso no cambiará el hecho de que esta injusticia histórica es inmoral y peligrosa”, agregó.
La dirigente dijo además que “la cruel prohibición del presidente Trump debilita nuestra lucha contra el terror y ofrece a nuestros enemigos una nueva y poderosa herramienta de reclutamiento, haciendo que Estados Unidos sea menos seguro”.
La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) ha dicho que el fallo del máximo tribunal de justicia “pasará a la historia como uno de los grandes fracasos de la Corte Suprema”.
La batalla de Trump por prohibir la entrada de musulmanes comenzó en 2016 cuando una pareja perpetró un atentado en San Bernardino, California y el mandatario, en ese tiempo candidato a la presidencia, aprovechó la ocasión para prometer un "bloqueo completo y total" a la entrada de musulmanes a Estados Unidos con el fin de detener el terrorismo yihadista.
"Hasta que no podamos determinar y comprender este problema y la peligrosa amenaza que representa, nuestro país no puede seguir siendo víctima de los horrendos ataques de personas que solo creen en la yihad y que no razonan ni tienen respeto por la vida humana", afirmó Trump en aquel entonces.
Una semana después de instalado en la Casa Blanca, Trump firmó la orden ejecutiva titulada "Protegiendo a la Nación de la Entrada de Terroristas Extranjeros". El decreto entró de inmediato en vigencia desatando el caos en puntos de salida en los países afectados y en puertos de entrada en EEUU debido a que familias enteras no pudieron embarcar sus vuelos hacia Estados Unidos, ni entrar al país aquellos que venían en camino.
También se registraron manifestaciones masivas en los aeropuertos y abogados, junto con activistas de derechos civiles, acamparon en los puertos de entrada aéreos y terrestres para asesorar y representar a aquellos que eran retenidos en aduanas y no se les permitía el ingreso a Estados Unidos, algunos de ellos incluso residentes legales permanentes.