Cómo Nayib Bukele ha conseguido reducir drásticamente los homicidios en solo unos meses en El Salvador
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SAN SALVADOR, El Salvador. El pandillas.
Bukele ha logrado en sus primeros 81 días de gestión bajar el promedio diario de homicidios de 8.8 a 5.7. El nuevo gobierno tomó posesión el primero de junio, mes que cerró con 231 homicidios (un promedio de 7.7 diarios). La reducción continúo al siguiente mes, en julio, cuando la cifra bajó a 155 casos (un promedio de 5 crímenes diarios), uno de los meses con menos homicidios durante la última década.
La tendencia a la baja se mantiene en los primeros 20 días de agosto. Según las cifras de la Policía, hay 78 homicidios, que significa un insólito promedio de 3.9 al día. Incluso hubo un día de este mes, el 22 de agosto, que Bukele recurrió a Twitter para informar que no se registró ninguna muerte violenta.
En los meses previos a su nombramiento, entre enero y mayo, los últimos meses de gobierno de su antecesor Salvador Sánchez Cerén, del partido de izquierda FMLN, 1,343 salvadoreños fueron asesinados. El promedio diario en esos meses osciló entre los 7.5 y 10.9. En la recta final de su gobierno, febrero de 2019 fue el mes con menos homicidios para la istración de Sánchez Cerén: 210 asesinatos, un promedio diario de 7.5, una baja que Bukele ya superó con los resultados de julio.
¿A qué se debe el descenso?
Analistas, académicos y líderes religiosos que trabajan en comunidades acechadas por la violencia no tienen una explicación para la reducción súbita de los homicidios. El nuevo gobierno lo atribuye al “Plan Control Territorial”, una estrategia que en su mayoría se desconoce ya que el 90% de sus componentes es reservada, según Bukele.
El plan comenzó a implementarse el 20 de junio de 2019 y Bukele lo pintó como una estrategia de choque contra las pandillas. "Váyanse a sus casas. Ya se acabó. No hay más Mara Salvatrucha, No hay más Mara 18. ¿Cuál es el futuro que les queda? ¿La muerte o la cárcel?", dijo. Lo que siguió al anuncio fue una serie de medidas a endurecer el control de las cárceles, algo que ya había implementado el gobierno de Sánchez Cerén.
Además, Bukele ordenó contratar mil soldados más para reforzar el plan de seguridad y una serie de medidas para bloquear la comunicación de los líderes pandilleros que están en las cárceles, además de un aumento de controles en las vías públicas. El 12 de julio de 2019, el gobierno anunció la segunda etapa de su plan que consiste en llevar servicios básicos y programas de prevención a comunidades afectadas por la violencia.
A un paso de superar a “la tregua”
Septiembre de 2013 fue uno de los meses con menos homicidios en El Salvador durante la última década. Las estadísticas oficiales reportan que ese mes sucedieron 143 homicidios, es decir, un promedio de 4.3 crímenes al día.
En ese momento, El Salvador era gobernado por su primer presidente de izquierda, Mauricio Funes. La istración Funes logró esa baja en los homicidios gracias a una polémica negociación con las pandillas, conocida como "la tregua". El gobierno les concedió beneficios carcelarios a cambio de una reducción de homicidios. Varios de los artífices de aquella estrategia fueron procesados judicialmente.
En su tercer mes de gobierno, Bukele camina a superar el mejor resultado de la tregua.
Hasta el 20 de agosto de 2019, la Policía reportaba 78 homicidios, un promedio de 3.9 homicidios diarios. Hace un año, los salvadoreños convivían con 9.1 homicidios diarios. De mantenerse la tendencia, en agosto de 2019, durante su tercer mes de gobierno, Bukele podría superar el mes con menos homicidios durante la tregua.
¿Cómo se explica esta reducción de homicidios? Es una pregunta difícil de responder dice Mario Vega, pastor de la iglesia Elim, quien trabaja en proyectos con niños y adolescentes de comunidades afectadas por la violencia.
Bukele anuncia sus decisiones de gobierno en redes sociales, durante las conferencias de prensa evita las preguntas incómodas y concede la palabra solo a periodistas que adulan su labor. Además, la Casa Presidencial ha centralizado la comunicación de los ministerios y las explicaciones sobre la aplicación y resultados de políticas públicas es casi nula.
¿Hay otro motivo además del plan de seguridad?
“Los resultados de reducción de homicidios son semejantes a los del período de "la tregua" (con las pandillas). Yo no le podría decir si esa baja corresponde al plan de control territorial o si hay otra causal (...) Uno se queda sin respuesta porque esta es una istración secretista y dan a conocer solo lo que ellos quieren", dice Vega, quien trabaja en comunidades como la Panamá, de Soyapango, o la colonia Iberia, de San Salvador, lugares donde hay pandillas.
Al pastor Vega le sorprende que el gobierno implementó el “Plan Control Territorial” en 16 municipios, pero que los resultados exitosos en cuanto a reducción de homicidios ha sido a nivel nacional.
Esa reducción tampoco podría atribuirse a programas de prevención porque los fondos para esa parte del plan aún no están aprobados. "En las comunidades hay más policías y más soldados. Aparentemente es un plan de mano dura, pero en el terreno (las comunidades) no es así. Esas son las cosas que son extrañas". El pastor Vega documentó abusos policiales contra jóvenes, un problema que se agravó entre los años 2015 y 2016, pero ahora asegura que estos se han reducido.
El abogado René Castellón, catedrático y autor del libro 'Manual básico de criminología', dice que cualquier reducción de la delincuencia común u organizada guarda relación con las medidas político-criminales que implementa un Estado.
"En el país se ha implementado la medida de recuperación de territorios hasta hace un tiempo dominados por grupos criminales; también se ha efectuado traslados de población reclusa y bloqueado su comunicación. Son claras medidas de política criminal, las que indefectiblemente han impactado en la reducción de los homicidios", dice el académico.
Pero el politólogo Álvaro Artiga agrega una variable más al debate. “Ahora hay un silencio total, como un consenso social en torno a lo que está haciendo el presidente. Uno debe de preguntarse si no hay una negociación con los líderes de las pandillas", apuntó durante un programa de televisión.