Las ‘Momias de Guanajuato’: el escalofriante museo que muestra las víctimas de una pandemia de hace 150 años (fotos)

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Visitantes observan la exposición de cuerpos del Museo de las Momias de Guanajuato, a unas 100 millas al noreste de la Ciudad de México. El lugar alberga unos 117 cuerpos secos bien conservados. "Hay 64 mujeres, 30 hombres, 16 infantes, 3 fetos, 3 cabezas y un busto”, según explicó a la agencia EFE Ricardo Rodríguez Ojeda, director del museo. Crédito: Mario Armas/EFE/EFE

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¿Quiénes fueron? Durante la ‘tercera pandemia de cólera’, un brote de esta enfermedad que mató cerca de un millón de personas en todo el mundo entre 1852 y 1860, México aprobó una ley que requería que los familiares de los difuntos pagasen un impuesto por conservar su espacio en los panteones. Vea aquí las fotografías de las 20 epidemias más devastadoras de la historia
Crédito: Enrique Contla/EFE/EFE

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En Guanajuato, las muertes fueron tan numerosas que la ciudad se quedó sin espacio suficiente en los cementerios, así que los sepultureros exhumaron los cuerpos de los familiares morosos y los almacenaron en las catacumbas del panteón municipal. Crédito: tomascastelazo.com/Wikicommons

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En 2017 el reportero de Primer Impacto Tony Dandrades visitó este peculiar museo. Esta fue la reseña en video publicada entonces.

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Los sepultureros se sorprendieron al abrir los nichos y encontrar los cuerpos momificados. No era resultado del trabajo de embalsamamiento llevado a cabo por el hombre.
Rocío Muñoz Ledo/EFE

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“Los cadáveres se habían conservado de manera natural gracias a las condiciones ambientales del lugar en que fueron enterrados, nichos donde no podían penetrar la humedad y el oxígeno”, explicó Rodríguez.
Rocío Muñoz Ledo/EFE

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De esta forma aparecieron personas comunes de todo tipo, asegura Rodríguez, y a diferencia de las momias de Egipto, no se trataba de cuerpos pertenecientes a guerreros ancestrales o reyes. Alberto Cabezas/EFE/EFE

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Los guías del museo que acompañan a los visitantes rara vez hablan de “cuerpos”, sino que se refieren a ellos con sus apodos o nombres: don Justo Hernández “el Hacendado”; doña Ignacia Aguilar, que fue sepultada viva; el “Revolucionario”; o “La China”.
Crédito: VW Pics/Universal Images Group via Getty

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Tan solo en la última semana de 2018, el museo recaudó 2 millones de pesos (unos 100,000 dólares), de acuerdo con datos de la tesorería municipal. Se trata del tercer museo más visitado en México. Crédito: RocÌo MuÒoz Ledo/EFE

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Según Rodríguez, en 2019 fueron más de 620,000 personas. “La gente viene por morbosidad, nada más”, dijo a EFE Gabriel Alcocer, uno de los custodios del museo. Durante los primeros años las momias eran visitadas de manera clandestina. Alberto Cabezas/(EPA) EFE/EFE

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Fotografías de la mediateca del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH), fechadas entre 1880 y 1890, muestran que en esa época al menos una veintena de cuerpos ya se hallaban en exhibición, aunque de manera informal. Esta fotografía fue tomada en 1952, 20 años antes del estreno de “El Santo contra las momias de Guanajuato”, la película protagonizada por el mítico luchador mexicano que lanzó a la fama a esta peculiar atracción. Crédito: Michael Ochs Archives/Getty Images

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Las momias se han convertido en un sello de la identidad de la ciudad y su exhibición ha causado polémica. Para algunos investigadores, las momias son una fuente de conocimiento, vestigios materiales de sociedades antepasadas. Otros académicos han criticado la “mercantilización y el morbo” de los restos momificados, y han propuesto que se les inhume por respeto.
Alberto Cabezas/(EPA) EFE/EFE

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“Sería importante sensibilizar a la sociedad y a los interesados en el respeto por la dignidad y el simbolismo de los cuerpos momificados", declaró en junio pasado la Comisión Nacional de Bioética de la Secretaría de Salud de México. Afirmó que esta exposición debe atender a propósitos científicos, culturales y educativos y que debe evitar que se descontextualice y promueva el morbo. Rocío Muñoz Ledo/EFE

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'Las momias de Guanajuato’ exhibidas en la capital mexicana, en agosto de 2009. “Para evitar que las momias sean cosificadas en eventos y asegurar que su exhibición dentro y fuera del Museo sea respetuosa, hay que enfatizar como criterio bioético la importancia de obtener el consentimiento o autorización de sus derechos de descendientes o familiares”, concluyó el informe de la Comisión Nacional de Bioética. Crédito: AFP/AFP via Getty Images

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Dos fotos del Museo de las Momias de Guanajuato, en México. Fotos cedidas por el museo. Crédito: RocÌo MuÒoz Ledo/EFE