La historia viral del niño de 12 años que recogió dinero para la lápida de su amigo que murió de cáncer
Desde hace unas semanas, Kaleb Klakulak lleva realizando varios trabajos para poder ofrecer una lápida a un amigo suyo que murió de leucemia y, cuya familia logró sepultarlo pero no tuvo dinero suficiente para pagarle una lápida con su nombre.
Su amigo se llamaba Kenneth 'K.J.' Gross y, al igual que Klakulak, tenía 12 años y los dos se conocían desde segundo grado. En 1 de mayo falleció en un hospital por una insuficiencia cardíaca luego de luchar durante años contra el cáncer.
A pesar de que habían pasado varios meses después del fallecimiento de su amigo, Klakulak decidió recaudar dinero para la lápida luego que la mamá de su amigo, LaSondra 'San' Singleton, dijera que no tenía recursos ya que había tenido que dejar de trabajar para cuidar de su hijo en el hospital.
Además de los trabajos, como recoger hojas o recuperar botellas usadas, también decidió abrir una cuenta para recaudar donaciones. La historia de este adolescente se volvió viral y hasta medios de China se hicieron eco de ella.
Así, los esfuerzos de Kaleb, que vive en una pequeña ciudad al norte de Detroit, llegaron también hasta los oídos de David Techner, el propietario de una funeraria que quedó sorprendido por la iniciativa del adolescente.
" La historia realmente me llegó al corazón", declaró Techner al diario The Detroit News. "Ahí está un niño de 12 años que vio una necesidad e hizo lo que tenía que hacer. Yo simplemente estoy siguiendo su liderazgo", explicó. Por eso, decidió donar una lápida para que la madre de su amigo pueda visitar la tumba de su hijo durante las vacaciones de Navidad, tal como deseaba Klakulak.
Sin embargo, pese a la donación, el joven tuvo que sortear otro obstáculo para poder ver su deseo cumplido. El cementerio donde está enterrado su amigo no permite instalar nuevas lápidas hasta la primavera. Sin embargo, el martes por la tarde, la directora istrativa del camposanto, Bonita Smith, decidió que la regla no se iba a aplicar en este caso.
La lápida que será instalada es negra y tiene letras grises y un ángel sosteniendo un corazón. Además, se puede leer: "KJ Gross, hijo, hermano y amigo querido".
" Estoy muy abrumada y agradecida", dijo la madre del niño fallecido. "Pero he tenido que revivir tanto estos últimos días con todos los que quieren hablar de ello. Es difícil", añadió.
"Pero mi otro hijo de 19 años me recordó lo que dije en el funeral de 'K.J.'", recordó Singleton. "Me dijo: 'Dijiste que querías que el mundo conociera su historia. Cuando le pides a Dios algo, a veces lo consigues, pero no es tan fácil como uno quisiera'", concluyó.