La historia de Sandy Hook se repite casi 10 años después en la Escuela Primaria Robb en Texas
la masacre de Sandy Hook, que es considerado el peor tiroteo masivo ocurrido en una primaria de Estados Unidos. El caso de la Escuela Primaria Robb se registra casi una década después.
Lo que se sabe del incidente reciente es que el pistolero tenía 18 años, era estudiante de preparatoria y murió en la escuela que atacó a balazos en Uvalde, cerca de la frontera con México.
Antes de irrumpir en el plantel le disparó a su abuela, cuyo nombre no ha sido difundido, y luego se dirigió a la primaria. El joven fue abatido allí por las fuerzas del orden.
“Se cree que abandonó su vehículo e ingresó a la Escuela Primaria Robb en Uvalde con una pistola y también pudo haber tenido un rifle, pero eso aún no está confirmado, según mi informe más reciente”, dijo el gobernador Greg Abbott, quien calificó el incidente como una “tragedia horrible”.
El sospechoso era estudiante de la preparatoria Uvalde y es ciudadano estadounidense, dijo Abbott.
"Se cree que los oficiales que respondieron lo mataron", informó el gobernador. "Parece que dos oficiales que respondieron fueron alcanzados por rondas, pero no tienen heridas graves", agregó.
“Se informa que el sujeto le disparó a su abuela justo antes de ingresar a la escuela. No tengo más información sobre la conexión entre esos dos tiroteos”, indicó Abbott.
El caso Sandy Hook
Los hechos ocurridos en la Escuela Primaria Sandy Hook son parecidos al de la Escuela Primaria Robb.
Hace casi una década, el 14 de diciembre de 2012, Adam Lanza, un joven de 20 años, asesinó a su madre Nancy Lanza en su casa en Newtown, Connecticut, y más tarde fue a la primaria a descargar tres armas de fuego.
20 estudiantes de 6 y 7 años de edad, así como seis adultos fueron baleados fatalmente.
El pistolero tomó tres armas de fuego que estaban en su vivienda: un rifle de asalto semiautomático AR-15 y dos pistolas. Llegó a la escuela vestido con uniforme negro y un chaleco militar.
Ese día había 700 alumnos tomando clases en el plantel.
Cuando los agentes del orden se acercaron al salón donde se resguardaba, Lanza tomó una pistola y se suicidó.
El debate sobre las armas
El tiroteo de Sandy Hook abrió un debate sobre el control de armas en EEUU, incluidas las propuestas para hacer que el sistema de verificación de antecedentes sea universal y la aprobación de una nueva legislación federal y estatal que prohibiera la venta y fabricación de ciertos tipos de armas de fuego semiautomáticas y cargadores con más de diez balas.
Pero diez años después, el porte y proliferación de armas de fuego, incluso de tipo militar en algunos estados, sigue sin regularse a nivel federal.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) advirtieron en un reciente informe que el número de homicidios con armas de fuego aumentó en un 35% durante 2020, en comparación con 2019, alcanzando un total de 19,000 casos.
Los CDC aseguran que “este es un aumento histórico. Es el nivel más alto en 25 años”.
En el reporte se asegura que más de la mitad de las muertes con armas durante la pandemia fueron casos de suicidio.
Hace una semana, un informe de la Agencia de Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) reveló que Estados Unidos se encuentra en medio de un gran auge en la compra de armas que no muestra signos de disminuir, ya que la cantidad de armas de fuego fabricadas en el país casi se ha triplicado desde 2000 y se ha elevado, sobre todo, en los últimos tres años.
A partir de 2009, cita la ATF, las pistolas semiautomáticas tipo Glock, compradas para protección personal, comenzaron a venderse más que los rifles, que se han utilizado típicamente en la caza.
En el documento de 306 páginas, la dependencia indicó que en 2021 las agencias del orden recuperaron 19,344 armas de fabricación casera llamadas ‘armas fantasmas’, diez veces más que en 2016. Las ‘armas fantasmas’ son casi imposibles de rastrear pues no tienen números de serie.