Encuesta: hispanos manifiestan más síntomas de ansiedad y depresión durante la pandemia que otras minorías
Ansiedad y depresión. Esas son las dos principales cargas emocionales que están experimentando los estadounidense durante la pandemia del coronavirus, de acuerdo con una reciente encuesta en hogares desarrollada por el Centro Nacional de Estadísticas de Salud (NCHS) en asociación con la Oficina del Censo.
Esta encuesta en línea de 20 minutos fue diseñada con el fin de “complementar la capacidad del sistema estadístico federal para responder rápidamente y proporcionar información relevante sobre el impacto de la pandemia de coronavirus”, indica un reporte de los Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
La recopilación de datos comenzó el 23 de abril de 2020 y se prevé que continúe durante 90 días. Se preguntó a un total de 108,763 participantes mayores de 18 años o más (69,316 del 23 de abril al 5 de mayo y 39,447 del 7 al 12 de mayo) sobre su salud mental.
De acuerdo con los resultados, la minoría hispana es la que expresa mayores signos de desórdenes emocionales derivados de la crisis del coronavirus. Más de 36% de los consultados expresaron sentir ansiedad. Le siguen los afroestadounidenses con 33%, la población blanca con 27.8% y los asiáticos con 26.3%.
En general, el 24% de los consultados mostró síntomas clínicamente significativos de trastorno depresivo mayor y el 30% mostró síntomas de trastorno de ansiedad generalizada.
El cuestionario que se pasó a los encuestados plantea preguntas como las siguientes:
- En los últimos 7 días, ¿cuántas veces te ha molestado... tener poco interés o placer en hacer las cosas?
- En los últimos 7 días, ¿con qué frecuencia se ha sentido molesto por... sentirse deprimido o desesperado?
- En los últimos 7 días, ¿con qué frecuencia le han molestado los siguientes problemas... sentirse nervioso, ansioso o con los nervios de punta?
- En los últimos 7 días, ¿con qué frecuencia le han molestado los siguientes problemas... No ser capaz de detener o controlar la preocupación?
Las respuestas ofrecen ofrecen una panorámica en tiempo real sobre la salud mental colectiva del país después de tres meses de temor, aislamiento, aumento del desempleo y continua incertidumbre ante la pandemia del coronavirus que está muy cerca de dejar en Estados Unidos 100,000 muertes.
El azote del covid-19 a EEUU y particularmente al mercado laboral ha generado más de 38.9 millones de desempleados, una cifra que los expertos han comparado con la crisis de la Gran Depresión.
No resulta extraño el registro de estados emocionales negativos. Discriminado por géneros, el estudio indica que el 36.1% de los hombres encuestados expresa haber sentido algún tipo de ansiedad o depresión, al igual que el 26.7% de las mujeres.
Estas cargas emocionales han estado presentes en el 42% del grupo que tiene entre 18 y 27 años de edad; así como en el 34.3% del grupo comprendido entre los 30 y los 39 años; el 31.9% de los que tienen entre 40 y 49 años, y el 31.3% de las personas entre los 50 y los 59 años.
Entre los más jóvenes es particularmente preocupante el problema. Paul Gionfriddo, presidente del grupo Mental Health America, subraya que durante la reapertura económica que ha tenido lugar las últimas semanas en Estados Unidos "se ha hablado mucho sobre el espaciamiento de los pupitres y las proporciones de las aulas, pero no se ha hablado mucho sobre el apoyo a la salud mental".
"Para empezar, tenemos que hacer muchas más pruebas de salud mental entre los jóvenes", dijo Gionfriddo entrevistado por el diario The Washington Post.
Desde el comienzo de la pandemia varios estudios alertaban sobre los riesgos de que en paralelo al drama de carácter sanitario sanitario se disparase un problema colectivo de estados de ansiedad y depresión derivados del aislamiento social, sobre todo en una sociedad como la estadounidense que ya viene arrastrando una crisis de salud mental.
Eric Klinenberg, sociólogo de la Universidad de Nueva York que ha estudiado el impacto del aislamiento, señalaba en marzo que “hemos entrado en una nueva fase de daño social. Va a producirse un nivel de sufrimiento social relacionado con el aislamiento y el coste del distanciamiento social que muy poca gente está discutiendo por el momento”.
Ya antes de que estallase la pandemia, había reportes sobre las consecuencias del aislamiento social en adultos mayores. Un informe de la Academia Nacional de las Ciencias señala que una cuarta parte de los adultos mayores se encuadran en la definición de personas socialmente aisladas, y el 43% se sienten solas.
