Trump está a punto de reconocer la soberanía de Israel sobre territorios ocupados
El presidente Donald Trump sigue empeñado en cambiar décadas de política exterior estadounidense de consenso bipartidista y de paso hacerlo via Twitter.
La tarde del jueves, Trump publicó un mensaje en la red social asegurando que “¡Después de 52 años es hora de que los Estados Unidos reconozcan plenamente la soberanía de Israel sobre los Altos del Golán, lo que es de importancia crítica desde el punto de vista estratégico y de seguridad para el Estado de Israel y la estabilidad regional!”.
Inmediatamente, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu agradeció el “valiente” gesto de su colega estadounidense en un mensaje en su cuenta Twitter.
“En un momento en el que Irán busca usar a Siria como una plataforma para destruir a Israel, el presidente Trump valientemente reconoce la soberanía israelí sobre los Altos del Golán. ¡Gracias, señor presidente Trump!”, escribió Netanyahu.
El primer ministro tendrá oportunidad de agradecer directamente a Trump la próxima semana cuando realice una visita de dos días a Washington.
Este miércoles Netanyahu acompañó al secretario de Estado, Mike Pompeo, al Muro de los Lamentos en Jerusalén, en la primera vez que un alto funcionario estadounidense visita esa zona sagrada del judaísmo junto a un representante del gobierno de Israel.
Los Altos del Golán eran parte de Siria hasta la llamada Guerra de los Seis Días, de 1967, cuando Israel se enfrentó simultáneamente con Siria, Egipto y Jordania, países estos últimos a los que quizó Gaza y la península del Sinaí y Cisjordania, respectivamente.
El Sinaí fue devuelto a los egipcios, mientras Gaza y Cisjordania quedaron como los territorios ocupados militarmente por Israel que istra la Autoridad Nacional Palestina. El Golán sigue bajo control israelí.
Naciones Unidas no reconoce la soberanía israelí sobre esos territorios, que Siria exige que le sean devueltos como parte de un eventual plan de paz con Israel.
Sin embargo, el gobierno de Damasco no está en posición de plantear negociaciones por la guerra civil que lucha desde hace 8 años para tratar de controlar grandes partes de su territorio.
En 2017 Trump cambió la tradición diplomática estadounidense al anunciar la mudanza de la embajada en Israel a Jerusalén, ciudad que los palestinos reclaman como la capital de un futuro Estado Palestino.
