El encuentro oficial con el papa Francisco del presidente Joe Biden y su esposa Jill, vestida de negro y llevando el respectivo velo requerido por el protocolo.
Las visitas privadas al máximo líder de la iglesia católica están regidas por estrictas normas. Por ejemplo, el Vaticano establece que en las audiencias papales las mujeres deben usar mangas largas y ropa formal negra. También un velo o mantilla negra debe cubrir sus cabezas.
Crédito: Divisione Produzione Fotografica/AP
Las visitas privadas al máximo líder de la iglesia católica están regidas por estrictas normas. Por ejemplo, el Vaticano establece que en las audiencias papales las mujeres deben usar mangas largas y ropa formal negra. También un velo o mantilla negra debe cubrir sus cabezas.
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Melania e Ivanka Trump llevando mantillas cuando acompañaron al expresidente Donald Trump en su audiencia papal de 2017.
Para estos encuentros las damas deben usar una vestimenta sencilla y nunca escotada. Lo ideal es que cubran los hombros y si son faldas deben quedar por debajo de la rodilla. Las visitantes también deben evitar lucir joyas llamativas y optar por piezas discretas.
Crédito: Evan Vucci/Ap
Para estos encuentros las damas deben usar una vestimenta sencilla y nunca escotada. Lo ideal es que cubran los hombros y si son faldas deben quedar por debajo de la rodilla. Las visitantes también deben evitar lucir joyas llamativas y optar por piezas discretas.
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Estas normas, sin embargo, a veces son obviadas. En la visita oficial de la canciller alemana Ángela Merkel a Francisco en 2017 la mandataria optó por no llevar la cabeza cubierta. Tampoco lo hizo Michelle Bachelet cuando visitó a Francisco en 2015 siendo presidenta de Chile. Crédito: MAURIX/Gamma-Rapho via Getty Images
La estricta regla de vestimenta de las mujeres tiene una excepción: las reinas católicas o las esposas de los reyes católicos pueden usar un vestido blanco durante las audiencias con el líder católico. Presidentas, cancilleres o Jefas de Estado no gozan de este privilegio, tampoco las esposas de los presidentes.
En la foto la reina Letizia Ortiz, esposa de Felipe VI, rey de España, vestida de Blanco y besando el anillo del papa Francisco.
Crédito: Mondadori Portfolio/Mondadori Portfolio/Archivio Mar
En la foto la reina Letizia Ortiz, esposa de Felipe VI, rey de España, vestida de Blanco y besando el anillo del papa Francisco.
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La reina Mathilde de Bélgica (en la foto), la reina Letizia de España o la duquesa María Teresa de Luxemburgo, todas de monarquías católicas, han visitado al papa vestidas de blanco. A pesar de haber ido al Vaticano como líderes de sus países, Cristina Kirchner, Michelle Bachelet o Ángela Merkel vistieron de negro. Crédito: William Van Hecke/Corbis via Getty Images
Sin importar la prominencia del visitante, el protocolo indica qué la forma correcta para dirigirse al líder católico es ‘Su Santidad’. No debe confundirse con ‘Su Eminencia” o Su ‘Excelencia”, que es como deben ser llamados los Cardenales y Obispos, respectivamente.
Sin embargo, esta regla no siempre se cumple. En junio de 2007 George W. Bush fue criticado por dirigirse al papa Benedicto XVI como "señor". Crédito: JIM WATSON/AFP via Getty Images
Sin embargo, esta regla no siempre se cumple. En junio de 2007 George W. Bush fue criticado por dirigirse al papa Benedicto XVI como "señor". Crédito: JIM WATSON/AFP via Getty Images
El tradicional saludo al Papa besando su anillo como señal de respeto solo es un requisito para los católicos, pero algunos líderes optan por no hacerlo.
A pesar de ser un fervoroso católico, el presidente Joe Biden saludó a Francisco solo con un cálido apretón de manos. No lo besó en el anillo, al menos no se ve en las fotos (el evento no tuvo cobertura en vivo). Tampoco lo había hecho en las reuniones previas que tuvo con el sacerdote argentino cuando era vicepresidente.
Crédito: Divisione Produzione Fotografica/AP
A pesar de ser un fervoroso católico, el presidente Joe Biden saludó a Francisco solo con un cálido apretón de manos. No lo besó en el anillo, al menos no se ve en las fotos (el evento no tuvo cobertura en vivo). Tampoco lo había hecho en las reuniones previas que tuvo con el sacerdote argentino cuando era vicepresidente.
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