Kellyanne Conway, asesora de Trump, violó la ley y debería ser removida de la Casa Blanca, según una investigación federal

Donald Trump, violó repetidamente la ley al hacer comentarios políticos mientras trabajaba en la Casa Blanca y debería ser removida de las oficinas federales, indicó la Oficina de Asesoría Especial de EEUU (OSC, por sus siglas en inglés) este jueves.
"Dado que la Sra. Conway es una infractora reincidente y ha demostrado que no respeta la ley, OSC recomienda que la retiren del servicio federal", indicó en un comunicado la OSC en referencia a comentarios políticos hechos en entrevistas de televisión y redes sociales.
La OSC, una agencia federal de investigación independiente, se refiere a la Ley Hatch, que prohíbe usar posiciones de cargos federales para intervenir en campañas electorales en curso.
El informe presentado al presidente indica que Conway "violó la Ley Hatch en numerosas ocasiones al referirse despectivamente de los candidatos presidenciales demócratas al hablar en su calidad de empleada federal durante las entrevistas de televisión y en las redes sociales".
La oficina OSC está dirigida por Henry Kerner, nominado por Trump para ocupar esa posición.
Además de las violaciones a la ley en entrevistas televisivas, en la carta de OSC se ejemplifica el 'poco respeto por la ley' de Conway cuando el 29 de mayo de este año dijo a los reporteros de la Casa Blanca: "Si intentas silenciarme a través de la Ley Hatch, no funcionará. Avísame cuando comience la sentencia de cárcel".
Un portavoz de la Casa Blanca citado por Politico criticó a la OSC diciendo que está influenciada "por medios liberales" y dijo que la decisión sobre Conway "viola su libertad de expresión".
"Las acciones sin precedentes de la OSC contra Kellyanne Conway son profundamente defectuosas y violan sus derechos constitucionales a la libertad de expresión", señaló el portavoz Steve Groves.
"Sus decisiones parecen estar influenciadas por la presión de los medios y las organizaciones liberales, y tal vez la OSC debería ser consciente de su propio mandato para actuar de manera justa, imparcial, no política, y no interpretar mal o armar la Ley Hatch".