Donald Trump nombrará a fuerte crítico de Obamacare como secretario de Salud y Servicios Sociales
El presidente electo Donald Trump eligió al representante por Georgia Tom Price, un acérrimo crítico de la reforma sanitaria Obamacare, como el secretario del Departamento de Salud y Servicios Sociales, según reportaron varios medios este lunes en la noche citando funcionarios con conocimiento sobre el equipo de transición.
Se prevé que el anuncio oficial se realice este martes, junto con otros del gabinete, algo que el vicepresidente electo Mike Pence anticipó en las últimas horas mencionando que será un día de "importantes anuncios".
La designación de Price, un cirujano ortopedista de 62 años, es un mal presagio para el futuro de la reforma de salud hecha por la istración de Barack Obama. Este sería un indicador de que Trump busca cumplir su promesa de acabar con Obamacare al elegir a quien ha liderado a los republicanos en contra del Affordable Care Act por considerar que "es una amenaza al servicio de salud de calidad y accesible".
"Las primas del seguro han subido, no bajado. Muchos estadounidenses perdieron la cobertura médica que les dijo una y otra vez el presidente que podrían conservar. Las opciones son menos", dijo recientemente el congresista.
Price siempre ha hecho énfasis en el tema de los precios y la accesibilidad. "El propósito de una reforma de salud debe ser avanzar en cuanto accesibilidad, calidad, grado de reacción e innovación", dijo el republicano en 2011 cuando se firmó la ley de Obamacare, alegando que ninguna de esas características mejorarían con esta reforma.
Y así lo ha continuado haciendo durante los últimos años para explicar cuál es la reforma sanitaria que debería implementarse en el país, revocando la actual y reemplazándola por una que incluya ideas de los republicanos como tener cuentas de ahorros exclusivas para la salud, grupos de aseguradoras de alto riesgo y permitir las ventas de seguros interestatales.
En ese sentido, Price ha sido uno de los pocos republicanos que no solo se ha opuesto a la iniciativa de salud instaurada en la istración actual, sino que ha propuesto alternativas para sustituirla y las ha estructurado en lenguaje legislativo para facilitar su viabilidad.
Como secretario de Salud, tendría a su cargo un departamento con un presupuesto anual de más de un billón de dólares, programas de salud que aseguran a más de 100 millones de estadounidenses y agencias que regulan alimentos y medicamentos y patrocinan muchas de las investigaciones biomédicas del país.
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