Rusia ataca centrales eléctricas de Ucrania ante el avance relámpago de tropas ucranianas
Rusia atacó con misiles este domingo centrales eléctricas y otra infraestructura, provocando apagones generalizados en toda Ucrania mientras las tropas de Kiev presionan en una rápida contraofensiva que ha expulsado a las fuerzas invasoras de Moscú de franjas de territorio que habían ocupado en el noreste.
El ataque provocó un gran incendio en una central eléctrica de la periferia occidental de Járkov y dejó al menos un muerto. El presidente Volodymyr Zelenskyy denunció los “deliberados y cínicos ataques con misiles” contra objetivos civiles, llamándolos actos de terrorismo.
"No hay instalaciones militares", escribió Zelensky en Twitter. "El objetivo es privar a la gente de luz y calor".
Járkov, la segunda ciudad más poblada de Ucrania, parecía estar sin electricidad el domingo por la noche. Los automóviles circulaban por las calles a oscuras y los pocos peatones utilizaban linternas o teléfonos móviles para iluminarse.
Por otra parte, la central nuclear de Zaporiyia, en el sur del país ocupado por Rusia, fue apagada por completo en un intento de evitar una catástrofe radiactiva mientras los combates continuaban en las inmediaciones.
Soldados rusos huyen disfrazados de paisanos en bicicletas robadas
La contraofensiva de Kiev en los últimos días para recuperar las zonas ocupadas por Rusia en esa región obligó a Moscú a retirar a sus soldados para evitar que se vieran rodeados, dejando atrás un número significativo de armas y municiones en una huida precipitada, al cumplir la guerra su día 200 este domingo.
El viernes, los soldados rusos huyeron como pudieron, en bicicletas robadas y disfrazados de lugareños, abandonando sus unidades y hasta tanques, indica un reporte del diario The Washington Post. Horas después los soldados ucranianos entraron en la región.
Los residentes quedaron atónitos ante las ruinas de 28 semanas de ocupación. "Simplemente dejaron caer los rifles al suelo", dijo Olena Matvienko, residente de uno de los pueblos reconquistados por tropas ucranianas, citada por el Post.
El comandante militar de Ucrania, el general Valerii Zaluzhnyy, señaló que sus fuerzas habían recuperado unas 1,160 millas cuadradas (unos 3,000 kilómetros cuadrados) desde que comenzó la contraofensiva, asegurando que los soldados ucranianos están a solo unas 30 millas (50 kilómetros) de la frontera rusa.
Un batallón compartió un video de las fuerzas ucranianas frente a un edificio municipal en Hoptivka, un pueblo a (poco más de una milla de la frontera y unas 12 al norte de Járkov.
El gobernador de Járkov, Oleh Syniehubov, dijo que los soldados ucranianos han recuperado el control de más de 40 asentamientos en la región.
Llueven críticas en Rusia, que habla de reagrupamiento de tropas
El propio informe diario del Ministerio de Defensa ruso, citado por el Post, presentaba el domingo un mapa que mostraba a las fuerzas rusas retirándose detrás del río Oskil, en el extremo oriental de la región de Járkov, un día después de que el ministerio confirmara que sus tropas habían abandonado la zona de Balakliya e Izyum, en la región para "reagruparse".
La retirada en tromba de Rusia de una amplia zona del territorio ucraniano generó inquietud y enojo en comentaristas y propagandistas del Kremlin y amplió las voces en Occidente que exigían el envío de más armas a Ucrania para que pudiera ganar, indica un reporte del diario The New York Times.
Los aliados de Ucrania se alegraron de los reveses de Rusia en el campo de batalla.
"Permítanme ser franco", dijo Gabrielius Landsbergis, el ministro de Asuntos Exteriores de Lituania, uno de los más firmes con que cuenta Kiev. "Ahora está fuera de toda duda que Ucrania podría haber expulsado a Rusia hace meses si se le hubiera proporcionado el equipo necesario desde el primer día".
La victoria de Ucrania está aún lejos de ser segura, sobre todo porque la segunda ofensiva ucraniana en el sur avanza con mucha menos rapidez, indica el porte del Times. Las tropas invasoras rusas están atrincheradas en fuertes posiciones defensivas cerca de la ciudad portuaria de Jersón, en el Mar Negro, lo cual hace muy difícil la recaptura por parte de fuerzas ucranianas.