Texas demanda a la istración Biden por CBP One: alega que la app para pedir una cita de asilo alienta la inmigración ilegal
El estado de Texas la app que usan los migrantes para agendar citas en la frontera alienta a los "inmigrantes ilegales a usar una aplicación móvil para programar su cruce ilegal a los Estados Unidos", se lee en un comunicado publicado por la fiscalìa general del estado.
La demanda, presentada el martes, es el más reciente recurso legal que ataca distintos aspectos del plan del gobierno federal para lidiar con la inmigración irregular después de que se levantara una restricción al asilo implementada durante la pandemia contenida en la norma conocida como Título 42 de los Centros para el Control de las Enfermedades (CDC).
En la querella, presentada en una Corte de Distrito del occidente de Texas, el estado argumenta que la regla de asilo alienta el uso de la app CBP One para que los migrantes que no cuentan con la documentación debida agenden una cita para presentarse en un puerto de entrada y busquen ingresar a Estados Unidos.
“La istración Biden concibió deliberadamente esta aplicación de teléfono con el objetivo de aprobar ilegalmente a más extranjeros para ingresar al país e ir a donde les plazca una vez que lleguen”, dijo el Fiscal General Paxton.
Texas afirma que Washington básicamente está alentando a las personas a venir a Estados Unidos, aun si no tienen los argumentos legales para quedarse.
"En un intento absurdo de abordar la invasión de inmigrantes ilegales a través de la frontera sur tras el final del Título 42, la istración Biden publicó una nueva regla final invitando inmigrantes a descargar una aplicación para programar una hora y un lugar convenientes para cruzar la frontera ilegalmente", se lee en el inicio de la demanda.
Paxton tambièn dijo que el gobierno ha dado prioridad "a la creación y protección de nuevas formas para que los extranjeros ilegales ingresen a este país, sin importar el costo o las consecuencias para los ciudadanos estadounidenses en apuros".
Asimismo, Texas alega que a través de la utilización de la aplicación CBP One, disponible para extranjeros en el norte de México a través de Apple App Store o Google Play Store, la istración Biden está intentando eludir la ley federal para "agilizar" el proceso de entrada de extranjeros ilegales a los Estados Unidos.
Texas añade que , según la ley federal, las personas que ingresen ilegalmente al país —con raras excepciones— deberían ser repatriadas, pero que la app no verifica si los migrantes que agendan citas serían elegibles para excepciones. El estado considera que, por lo tanto, el uso de la app por parte del gobierno de Biden esencialmente alienta a las personas a venir a Estados Unidos incluso si no son elegibles.
El estado, bajo control republicano, se queja de que tiene que enfrentar una carga financiera por los migrantes que entran al país por cuestiones como atención médica o educación.
Críticas a la nueva política migratoria de Biden
Aunque la demanda de Texas gira en torno a la app, busca desestimar todo el nuevo plan de gestión de la solicitudes de asilo del gobierno de Biden.
La regla entró en vigor después de que el Título 42 expirara a la medianoche del 11 de mayo. La nueva regulación hace que obtener el asilo sea sumamente difícil para los migrantes en la frontera sur si primero no solicitaron protección en un país que hayan atravesado en su camino hacia Estados Unidos o si no presentan una solicitud a través de la app.
El uso de la aplicación es parte fundamental del plan del gobierno para crear un sistema más ordenado en la frontera, donde los migrantes deben agendar una cita con antelación, pero cuando la app fue lanzada en enero recibió fuertes críticas debido a que presentaba problemas tecnológicos y al hecho de que desde entonces la demanda ha superado por mucho los espacios disponibles.
La aplicación móvil forma parte de una estrategia de tres puntos anunciada el 5 de enero. El primero, señala que los inmigrantes originarios de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela solo pueden ingresar a estados Unidos por medio de un patrocinador autorizado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) bajo un programa de perdón humanitario. El segundo punto indica que ciudadanos originarios de El Salvador, Guatemala y Honduras pueden ingresar por medio de una petición familiar (Formulario I-130 aprobado).
El terter punto indica que todo el resto de extranjeros que no tenga una visa para entrar a Estados Unidos, debe ingresar a la aplicación CBP One y postular a cualquier programa legal vigente de ingreso, como el asilo. Una vez autorizada la petición, el extrajero recibe una citación para presentarse en un puerto de entrada donde será entrevistado por un agente federal de inmigración.
Los migrantes pueden agendar citas para un puerto de entrada en particular, cinco de los cuales se encuentran en Texas.
La nueva regla relacionada con el asilo también ha sido blanco de críticas por grupos defensores de los migrantes que argumentan que Estados Unidos tiene la obligación de ofrecer asilo a quienes tienen una necesidad urgente. Han interpuesto una demanda en la que también buscan desestimar la medida.
Texas también forma parte de una denuncia en la que se acusa al gobierno federal de exceder su autoridad al permitir que hasta 360,000 personas procedentes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela ingresen cada año a Estados Unidos con un llamado 'parole' humanitario.
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