Fracasa en el Senado (otra vez) el proyecto de ley para seguridad fronteriza
Los republicanos del Senado bloquearon este jueves nuevamente un proyecto de ley destinado a limitar el número de inmigrantes a los que se les permite solicitar asilo en la frontera entre Estados Unidos y México.
El voto fue llevado al Senado por el líder de la mayoría, el demócrata Chuck Schumer, que busca evidenciar la resistencia del Partido Republicano a la propuesta de seguridad fronteriza, pese a que en la campaña presidencial son los mismos republicanos quienes culpan a la istración de Joe Biden de supuestamente tener la "frontera abierta".
La legislación, negociada por un grupo bipartidista de senadores, ya fue rechazada por la mayoría de los republicanos en febrero cuando se vinculó a un paquete de ayuda para Ucrania, Israel y otros aliados.
La legislación proporcionaría más dinero para los funcionarios de Aduanas y Protección Fronteriza, funcionarios de asilo, jueces de inmigración y tecnología de escaneo en la frontera, todo lo que los funcionarios han dicho que necesita el sistema de inmigración y protección fronteriza con fondos insuficientes.
Haría además la aplicación más rápida y estricta del proceso de asilo, además de otorgar a los presidentes nuevos poderes para expulsar inmediatamente a los migrantes si el número que encuentran los funcionarios fronterizos supera un promedio de 4,000 por día durante una semana.
Pero como la inmigración y la seguridad fronteriza se están convirtiendo en uno de los principales temas de las elecciones de este año, los demócratas están buscando rebatir los ataques del Partido Republicano, encabezados por el virtual candidato presidencial republicano, Donald Trump.
Demócratas buscan mostrar que los republicanos traban la ley de seguridad en la frontera
Schumer está tratando de defender una estrecha mayoría en el Senado en las elecciones de este año y ve el rechazo de los republicanos al acuerdo que negociaron como un “regalo” político para los demócratas.
Cuando se planteó la propuesta en febrero, una votación de prueba fracasó por 49 a 50, muy por debajo de los 60 votos necesarios para avanzar.
Incluso antes de que el proyecto de ley fuera publicado en su totalidad a principios de este año, Trump acabó con la propuesta, calificándola de “sin sentido” y de “regalo” para las posibilidades de reelección de Biden. Los principales republicanos pronto siguieron su ejemplo e incluso McConnell, que inicialmente había exigido la negociación sobre las medidas fronterizas, votó en contra de seguir adelante.
Un número significativo de demócratas también ha criticado la propuesta, principalmente porque no incluye ningún alivio amplio para los inmigrantes que ya han establecido su vida en Estados Unidos. “No aborda las causas fundamentales de la migración ni establece vías más legales”, dijo el senador Alex Padilla, demócrata de California.
Si bien una mayoría de demócratas apoyó nuevamente la votación de procedimiento para comenzar el debate sobre el proyecto de ley el jueves, la propuesta perdió fuerza en el Senado, ya que ni siquiera algunos de los autores principales, los senadores James Lankford, un republicano de Oklahoma, y Kyrsten Sinema, una independiente de Arizona, votó a favor de la iniciativa de Schumer.
"Teatro político" que no resuelve el tema de la frontera
Sinema calificó la votación como un “teatro político” que no hará nada para resolver los problemas en la frontera.
Los líderes republicanos pasaron gran parte de la semana denunciando la votación como una maniobra política descarada y amplificando una crítica muy gastada al presidente: que él es el supuesto responsable del número histórico de inmigrantes que han llegado a EEUU en los últimos años.
“Nos acercamos al final del mandato del presidente Biden y la paciencia del pueblo estadounidense por su incapacidad para asegurar la frontera sur se está agotando”, dijo el jueves el líder republicano del Senado, Mitch McConnell.
¿Una orden ejecutiva para la frontera?
Desde el colapso de la legislación del Senado en febrero, la istración Biden ha estado considerando órdenes ejecutivas sobre política fronteriza e inmigración. Ya ha realizado algunos cambios en el sistema de asilo destinados a acelerar el procesamiento y la posible expulsión de inmigrantes.
Sin embargo, la votación de prueba del Senado esta semana fue vista ampliamente como parte de un período previo a que Biden emitiera medidas fronterizas más amplias, potencialmente en junio, según reportes.
El presidente demócrata ha considerado utilizar una disposición de la ley federal de inmigración que da margen para bloquear la entrada de ciertos inmigrantes a Estados Unidos si fuera “perjudicial” para el interés nacional. Trump aprovechó repetidamente esta autoridad cuando estaba en la Casa Blanca, pero algunas de esas acciones enfrentaron desafíos legales.
El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, dijo a los periodistas el lunes que una legislación para abordar los problemas en la frontera, a diferencia de las acciones ejecutivas del presidente, sería más efectiva.
"La legislación proporciona herramientas que la acción ejecutiva no puede ofrecer", afirmó Mayorkas.