Surfside reportó en 2018 que un rociador pudo ser la causa del "exceso de agua" en el estacionamiento subterráneo de la Champlain Towers South
El 24 de marzo de 2018, la ciudad de Surfside hizo una inspección anual de estándares mínimos en la Champlain Towers South y encontró violaciones en el área de la piscina y del estacionamiento subterráneo. La firma Morabito Consultants volvió a conseguirlas meses después tras su revisión de la súper estructura de 136 apartamentos de lujo.
“Hay pintura pelada en el techo del garaje - hay un exceso de agua acumulada en el pavimento del garaje posiblemente por una filtración en un rociador”, se lee en el reporte de la alcaldía dirigido a la asociación del edificio sin detallar la urgencia de las reparaciones ni cuán graves eran.
Pidió que se arreglaran a más tardar el 24 de abril de 2018, pero con instrucciones superficiales. “Deben raspar y pintar la pintura pelada en el techo del garaje donde sea necesario - reparar el problema que está causando el exceso de filtración desde el techo del garaje hacia el pavimento”. En el documento, la alcaldía no pide al condominio indagar en qué podía estar causando esas filtraciones y charcos de agua recurrentes o si la fuente era, como supuso en su informe, un rociador dañado.
Univision Noticias tuvo a las fotos de esa inspección realizada por la oficial Michelle Shahryar bajo el caso 180313. En ellas se ve el agua acumulada en zonas del estacionamiento subterráneo y trozos de pintura guindando en el techo.
El 8 de octubre de 2018, poco más de seis meses después de aquel informe de Shahryar, Morabito Consultant presentó un reporte a la tesorera del condominio Champlain Towers South, Maggie Manrara, explicando que la estructura del garaje mostraba “signos de fallas y fatiga”, con “abundante agrietamiento” en las columnas, vigas y paredes. Alertó además de que “aunque una parte del daño es menor, la mayoría del concreto deteriorado necesita ser reparado rápidamente”.
Además, la firma explicó que una malas reparaciones hechas en el deck de la piscina —que se desconoce si fueron las requeridas por la ciudad de Surfside en marzo— generaron nuevas grietas sobre las que habían sido arregladas en esa área y empeoraron las filtraciones de agua hacia el estacionamiento subterráneo que, alertaron, se agravarían de no hacer las refacciones pertinentes.
Las imágenes presentadas por Morabito mostraban aún más el daño en el garaje: columnas abiertas en sus vértices con cabillas expuestas; el suelo con agujeros, en algunos casos a lo largo y en otros como boquetes circulares; goteras múltiples en el techo en espacios de un metro y mohosidad evidente. En ese momento, concluyó que el sellante que evitaba las filtraciones del deck de la piscina al garaje subterráneo estaba vencido, que la reparación debía hacerse completa aunque eso supusiera cambios en el piso de pavers de la alberca.
Una buena reparación, dijo entonces la firma Morabito Consultants, iba a ayudar a que se impermeabilizara el deck para que el agua corriera hacia los drenajes de la plataforma y no hacia el estacionamiento, como había pasado por años.
Apenas un mes después, quien entonces estaba a cargo de este edificio de parte de la alcaldía, Ross Prieto, dijo a la junta de residentes de la torre sur que el edificio estaba en “muy buen estado”, se lee en la minuta de ese encuentro hecha pública por la alcaldía de Surfside a raíz del derrumbe de más de 40% de la Champlain Towers South.
Otras inspecciones posteriores no pusieron énfasis en los daños estructurales al pie de la torre. Ni siquiera las que se realizaron un mes antes del colapso del edificio. En una previa a la que tuvo Univision Noticias, del 4 de marzo de 2020, el edificio pasó la inspección en casi todos sus renglones, incluso el estacionamiento: no hay llamados a revisar el drenaje de aguas, solo un comentario en la parte superior en el que, de nuevo, insisten en que la pintura del techo estaba pelada.
La misma evaluación positiva se lee en el área de la piscina.
Tras el derrumbe de la torre el pasado 24 de junio, los dueños de sus apartamentos han insistido en que la estructura no estaba en buen estado, como aseguró Prieto. Jacqueline Patoka, dueña de dos apartamentos en esa torre y quien estuvo a punto de pagar al condominio una sobrecuota de 100,000 dólares por cada uno de ellos para las reparaciones por la recertificación de 40 años, reiteró a Univision Noticias que el garaje “siempre estaba mojado”, que el agua caía permanentemente del techo y que las columnas estaban corroídas.
William Espinosa, quien fue jefe de mantenimiento de esa torre desde 1995 hasta el 2000, recuerda que ya desde entonces el garaje subterráneo se inundaba entre dos y tres veces al año cuando llegaban la temporada de huracanes y las mareas altas. En ese tiempo, asegura, la asociación del edificio solo pedía que el agua se recogiera con una bomba alquilada, porque la instalada no lograba absorber todo el líquido y se inundaba. Contó que nunca se hizo una evaluación para entender por qué pasaba eso y por dónde se filtraba una cantidad de líquido tal que en ocasiones subía hasta la puerta de los carros estacionados.
Por el hedor del agua, Espinosa sospechó entonces que se trataba de agua de mar que entraba a la torre.
Testimonios como el del exjefe de mantenimiento de la Champlain Towers South y el resultado de aquellas inspecciones han llevado a los expertos en ingeniería a sospechar que la respuesta al derrumbe del edificio estará en el área de la piscina, su plataforma y el estacionamiento subterráneo. Creen que la explicación se centra allí o en un posible socavón.
Las indagaciones están en proceso entre la Policía de Miami-Dade y distintas agencias federales. No existe una estimación de cuándo se conocerá qué pudo causar el deslave de la torre sin que nadie pudiera anticiparlo.