3 llamadas de asistencia 4 minutos después de zarpar: qué se sabe del choque del buque mexicano Cuauhtémoc contra el puente de Brooklyn
colisionar con el puente de Brooklyn y causar la muerte de dos personas, según informaron este lunes autoridades estadounidenses.
La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés), principal organismo de Estados Unidos encargado de la investigación, ofreció una rueda de prensa para ofrecer detalles sobre el caso, pese a que habrá que esperar un mes hasta contar con un primer informe.
"Lo que se puede esperar de nosotros es un informe preliminar en un plazo de 30 días", pese a que las investigaciones suelen durar entre "12 y 24 meses", aseguró Michael Graham, miembro de NTSB.
"Estamos al principio de la recopilación de información. Todavía no hemos podido hablar con la tripulación", añadió, tras señalar que todavía tienen que recibir permiso de las autoridades mexicanas para acceder al barco.
"Este es el inicio de un largo proceso", añadió Graham. "No sacaremos ninguna conclusión, no especularemos", advirtió.
Esta fue la cronología del accidente del buque mexicano Cuauhtémoc en Nueva York
Brian Young, investigador jefe del caso, declaró que el baro zarpó “con la asistencia de un remolcador” del muelle en el que llevaba atracado tres días con el objetivo de “dirigirse hacia el sur del East River e ir al mar”.
El barco salió en reversa, y fue en ese momento cuando la velocidad de la corriente del East River aumentó de tres a seis nudos.
“A las 20:24 horas (cuatro minutos después de zarpar), una emisión de radio de alta frecuencia fue emitida requiriendo asistencia de otros remolcadores en el área del puente de Brooklyn. A eso le siguieron otras dos llamadas de asistencia. A las 20:24 horas y 45 segundos, el mástil del navío chocó con la parte de abajo del puente”, describió el funcionario.
Young dijo que “quizás hubo llamadas telefónicas” pidiendo ayuda, pero aún no hay pruebas sobre ello.
Una de las incógnitas que planea sobre este caso se cierne sobre el remolcador que se ve en las imágenes junto al barco mexicano, ante las dudas de si se retiró demasiado pronto y debió seguir amarrado al barco o haberlo acompañado hasta que saliera al mar.
Preocupaciones similares sobre remolcadores surgieron cuando un gran buque de carga chocó contra un puente en Baltimore el año pasado.
Las autoridades dijeron este lunes que, según la información disponible, el remolcador lo había estado “asistiendo” a zarpar.
Aún tienen pendiente entrevistar al piloto del remolcador y capitán del barco, entre otros, para conocer aspectos clave como cuál es la tarea habitual del remolcador “una vez que se ha ayudado al barco a abandonar un muelle”.
Autoridades descartan tener información sobre posible pérdida de potencia en el buque, como dijo el alcalde de Nueva York
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, dijo poco después del accidente que el buque escuela perdió potencia antes de impactar contra el puente.
Sin embargo, los representantes de NTSB dijeron este lunes que no tenían información sobre una posible “pérdida de electricidad”, aunque analizarán “el estado del motor para ver si tuvo fallos”.
"Actualmente, estamos trabajando con nuestros homólogos, con el gobierno mexicano, para obtener a la nave. Somos optimistas de que tendremos ese muy pronto", dijo Graham.
Según el funcionario, 179 de la tripulación han sido trasladados a México y otros 94 están "trabajando a bordo", en el barco.
Los técnicos tienen que estabilizar los mástiles y las velas antes de poder trasladar el enorme buque que está atracado en uno de los muelles del sur de Manhattan, donde hay fuerte tráfico marítimo, ya que desde allí salen cruceros turísticos.
Durante el incidente, el Cuauhtémoc, que debía girar al sur hacia mar abierto, prácticamente cruzó el río y viró hacia el norte, pasando por debajo del puente cerca de uno de sus pilares.
La parte superior de los mástiles del navío, de 158 pies de altura, impactó ante la mirada de los transeúntes contra el puente que une Manhattan y Brooklyn.
De las 277 personas que iban a bordo, 19 resultaron heridas. Dos fallecieron y otras dos continúan heridas en estado crítico.
Algunos de los de la tripulación se encontraban sobre los soportes y las jarcias de las velas al momento del impacto, como se ve en los muchos videos compartidos en redes sociales por testigos que caminaban cerca de la orilla del East River.
Qué muestran las imágenes del choque del Cuauhtémoc
En las imágenes compartidas se observa que el barco estaba maniobrando en aguas turbulentas. La marea acababa de cambiar, y una fuerte corriente se dirigía hacia el East River en medio de fuertes vientos.
Aunque un capitán experimentado puede lidiar fácilmente con este tipo de condiciones, los errores pueden salir costosos en el puerto de Nueva York, donde los canales estrechos y curvos, los vientos que soplan desde Manhattan y los remolinos pueden combinarse para dificultar el paso.
Pero las imágenes de la colisión que grabaron los horrorizados espectadores muestran el momento en que el barco choca contra el puente mientras navegaba en reversa a toda velocidad, lo que deja entrever que el capitán perdió el control del motor.
Sal Mercogliano, un exmarino mercante que ha navegado en varias embarcaciones a través del puerto de Nueva York, dijo que todos esos “peores escenarios” —la altura del barco, una fuerte corriente, vientos intensos y la ausencia de un barco remolcador escolta— contribuyeron a la tragedia.
“ Lo prudente habría sido salir dos horas antes, cuando la marea estaba bajando. Ese habría sido el momento ideal”, explicó Mercogliano, quien escribe un popular blog de navegación. “Pero no creo que jamás imaginaron que el motor los impulsaría hacia el puente”.
Aun así, sostuvo que se evitó una catástrofe peor gracias al aparejo de acero del barco, el cual impidió que los mástiles cayeran al agua, así como al hecho de que la tripulación permaneció amarrada en su posición en lugar de correr el riesgo de que algunos pudieran caer desde una altura de 12 pisos mientras bajaban apresuradamente por las jarcias.
“Se pudo haber tenido a chicos amarrados ahogándose en el río”, manifestó. “Esto pudo ser mucho peor”.
Por qué el remolcador se había despegado del Cuauhtémoc
McAllister Towing, la compañía operadora del remolcador y responsable de cualquier piloto de muelle a bordo, rechazó hacer declaraciones públicas.
Tras el accidente del año pasado en Baltimore, Mercogliano indicó que las autoridades portuarias del lugar endurecieron las reglas para requerir un remolcador escolta y velocidades más lentas para los buques que navegan a través de la entrada del puerto. El barco en ese accidente, el MV Dali, era un buque portacontenedores de 95,000 toneladas, unas 50 veces más pesado que el Cuauhtémoc.
Los incidentes en el puerto de Nueva York son raros porque los enormes cargueros y los modernos buques de guerra suelen evitar la zona debido a la baja altura de los puentes. Pero se tiene previsto que en julio de 2026 el puerto albergue a la mayor flotilla de barcos altos de todo el mundo para celebrar el 250 aniversario de la fundación de Estados Unidos.
Mercogliano dijo que los investigadores evaluarán si la tripulación mexicana llevó a cabo las verificaciones de seguridad recomendadas antes de su partida. Por lo general, eso implica probar las hélices del motor, el timón y la propulsión de seis a 12 horas antes de su partida para asegurarse de que todo funcione correctamente y no se deje nada al azar.
“No es como tu coche donde simplemente cambias de marcha”, señaló.
La Guardia Costera dijo que se estaban evaluando los daños al Cuauhtémoc, además de que estableció un perímetro de seguridad de 50 yardas alrededor del barco mientras los gobiernos de Estados Unidos y México inician sus investigaciones.
El senador Chuck Schumer, un demócrata de Nueva York y líder de la minoría del Senado, dijo que cualquier investigación debería examinar si el congelamiento de contrataciones federales por parte del gobierno del presidente Donald Trump afectó los niveles de personal de la Guardia Costera, los procedimientos de seguridad y la preparación para responder a accidentes.
“Después de haber sido completamente informado sobre el accidente del Puente de Brooklyn de anoche, una cosa es predominantemente clara: hay más preguntas que respuestas en lo que respecta a cómo ocurrió exactamente este accidente”, expresó Schumer.
Con información de AP y AFP.