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Política

"Va contra nuestras familias y nuestra salud": las restricciones al aborto en Texas

En el Distrito-15 de Texas, la candidata demócrata Michelle Vallejo hace campaña para revertir la restrictiva ley antiaborto SB-8, parte de una estrategia conservadora que, tras lograr la derogación de Roe vs. Wade, busca limitar aún más el a la práctica con legislación estatal.
Publicado 24 Jun 2024 – 05:35 PM EDT | Actualizado 24 Jun 2024 – 05:35 PM EDT
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A dos años del fin del derecho federal al aborto en Estados Unidos, el país ha cambiado. Decenas de estados controlados por republicanos se han movido rápidamente para restringir o prohibir este procedimiento. En dirección opuesta, los estados en menos demócratas tratan de garantizar que las mujeres puedan acceder a una interrupción del embarazo, como lo hicieron por 50 años.

El 24 de junio de 2022, la Corte Suprema de Estados Unidos derogó el fallo Roe v. Wade, que dio protecciones constitucionales para el aborto a nivel federal, algo por lo que muchos republicanos lucharon por años.

El expresidente Donald Trump se atribuye el "mérito" del caso Dobbs v. Jackson Women’s Health Organization, que tumbó el derecho federal, aunque de cara a las presidenciales 2024, ha bajado el tono porque la prohibición total no es un asunto muy popular para los estadounidenses en general, incluso dentro del electorado republicano.

Texas y la 'Ley del latido del corazón'

Con el fin del eterno debate sobre 'Roe vs Wade', la pelea pasó a los estados.

Texas, que históricamente ha sido uno de los estados más activos en la oposición al aborto, promulgó una ley que prohibió todo aborto después de aproximadamente seis semanas de concepción.

La llamada 'Ley del latido del corazón', SB 8, fue promulgada en septiembre de 2021, antes de que la Corte Suprema anulara el derecho constitucional al aborto en junio de 2022.

Con ella, un aborto se puede castigar hasta con cadena perpetua, y un médico puede perder su licencia, ser multado con miles de dólares o incluso ir a la cárcel.

La práctica solo es posible si la paciente embarazada corre riesgo de muerte o “deterioro sustancial" de alguna "función importante" de su cuerpo e, incluso así, la evaluación médica es compleja.

"Esto es algo contra nuestras familias, contra nuestra salud y contra nuestra forma de vivir", aseguró a Univision Noticias la candidata demócrata a representante del Distrito 15 de Texas, Michelle Vallejo, quien, con una plataforma que incluye el derecho al aborto, busca destronar a la republicana Mónica de la Cruz, la primera latina en ser elegida para esa curul y quien apoya las restricciones impuestas por la ley tejana.

Texas-15: a 11 horas de una clínica de abortos

Como resultado, las clínicas de aborto tejanas cerraron, forzando a miles de mujeres a tener que salir del estado para acceder a ese servicio médico.

El Distrito 15 de Texas es precisamente uno de los lugares del país donde las mujeres que necesitan un aborto deben invertir más tiempo viajando hasta llegar a un centro clínico que las pueda atender, de acuerdo con el 'Mapa de al aborto por distrito del Congreso' creado por el Center for American Progress, un centro de estudios políticos de tendencia liberal.

Desde 2021, un viaje que tomaba en promedio media hora hasta un centro de salud reproductiva , hoy toma casi 11 horas, lo que lo complica sobre todo a mujeres de menos recursos que pueden no tener los medios para afrontar un viaje así o perder días de trabajo.

Vallejo ilustra el problema contando la historia de una madre de dos con residencia en el área de Dallas cuando tuvo que recurrir a un aborto por razones médicas.

Michelle Vallejo habla del caso de una mujer que no quería abortar pero lo necesitaba

Se trata del nacionalmente famoso caso de Katie Cox: quien junto a su pareja, Justin Cox, esperaba a su tercer hijo, una niña.


Cursando el 2023, Cox estaba de 18 semanas cuando se enteró de que su bebé podría tener trisomía 18, una enfermedad rara con riesgo de defecto cardíaco y muerte. El síndrome de Edwards, como se conoce el mal, es una peligrosa condición genética que no le permite al feto sobrevivir.

Luego, los médicos le hicieron más pruebas y le dijeron que era probable que el bebé muriera en el útero o poco después del nacimiento. Podría representar riegos para la madre como hemorragias y rupturas del útero. Su médico le advirtió a Cox que el embarazo pondría en peligro su salud así como su fertilidad, ya que podría sufrir de ruptura uterina y una posterior histerectomía.

“Nunca pensé que estaría en esta situación: veinte semanas de embarazo con un bebé que no sobrevivirá y que podría poner en peligro mi salud y otro futuro embarazo”, dijo entonces Cox.

Con toda esta información, la pareja decidió terminar el embarazo, pero en Texas no podría abortar. Cox ó al Centro de Derechos Reproductivos, que presentó una demanda.

A sus 20 semanas de embarazo, un juez le dio permiso para el aborto, pero el fiscal general de Texas, Ken Paxton, pidió a la Corte Suprema del estado que detuviera la orden. La pareja debió irse a Nuevo México para acceder a este servicio de salud.

"(Katie Cox) tenía un embarazo muy complicado y le pidió auxilio al estado de Texas para poder obtener un aborto aquí, en Texas y la obligaron a irse del estado para poder acceder a ese cuidado médico. Usted puede imaginarse lo que estamos viviendo y viendo aquí en el Distrito 15 que está cerca de la frontera", apuntó Vallejo a Univision Noticias.

La dificultad de hablar de aborto entre hispanos

Tradicionalmente se considera que los hispanos, que conforman el 81% del Distrito-15, tienen valores religiosos y familiares que los ponen en contra de la práctica del aborto. Y eso puede ser un problema para muchos aspirantes a cargos de elección pública, como Vallejos, a la hora de hacer campaña

"Fue la primera conversación que tuve antes de poner mi nombre en la boleta, con mi propia abuela. Le pregunté qué pensaba sobre el aborto y ella me dijo: ‘Mira, no me gusta la idea del aborto’", explicó Vallejo, reconociendo que esas no son conversaciones que se tengan naturalmente las familias hispanas.

"Pero al final de nuestra conversación, estábamos de acuerdo en que las mujeres embarazadas y que tienen que tomar esta decisión, deben hacerlo ellas mismas. Deben tener la protección y los derechos de hacerlo con sus doctores. Y de que nadie más se involucre en eso", dijo Vallejo.

Sin embargo, Vallejo considera que la salud reproductiva es parte integral dle derecho al a la salud del que debe gozar la comunidad hispana.

Otros efectos de la SB-8

Los legisladores tejanos promocionaron la ley SB-8 como una herramienta para salvar vidas, aunque un estudio publicado por Journal of the American Medical Association (JAMA Pediatrics) indica que ha terminado siendo más mortal.

Esto, porque la ley en Texas, no prevé excepciones para los embarazos que impliquen defectos de salud graves o genéticos y las mujeres están obligadas legalmente a llevar a estos bebés hasta el nacimiento, según la ley estatal.

Desde su promulgación, más bebés murieron antes de cumplir su primer año, probablemente por defectos de nacimiento o problemas genéticos que no les habrían permitido vivir. Son embarazos que normalmente habrían terminado en un aborto, según los investigadores.


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