La esposa de Andrew Yang revela que su ginecólogo la agredió sexualmente cuando estaba embarazada
Evelyn Yang, la esposa del precandidato demócrata abusos sexuales por parte del ginecólogo que la trataba.
"En ese momento sabía que estaba mal, sabía que estaba siendo agredida sexualmente. Me imaginaba tirándole una silla y huyendo mientras le gritaba, pero no pasó. Estaba confundida, luego me di cuenta de lo que estaba sucediendo y me bloquée", le dijo Yang a la periodista Dana Bash. "Recuerdo que trataba de mirar a un punto fijo en la pared para evitar mirar a su cara mientras me agredía sexualmente. Solo esperaba que acabara".
Pese a que Yang era consciente de lo que le había sucedido, la mujer decidió ocultarlo por años para evitarle sufrimiento a su familia y solo confesó lo que le había pasado a su esposo cuando se enteró que el ginecólogo que le agredió, el doctor Robert Hadden, que trabajaba en una prestigiosa institución médica de la Universidad de Columbia en Nueva York, había sido denunciado por otras mujeres.
Yang recuerda que, al enterarse, su esposo lloró: "Dice que se acuerda que un día llegué a casa despotricando contra los médicos pervertidos y dije algo como: '¿Por qué dejan a los hombres ser ginecólogos?' No tiene ningún sentido. Y él recordó que yo había hecho este comentario. Y se sintió muy mal. Se sintió culpable de no haber hecho la conexión o preguntarme más".
Los seguidores de su esposo le motivaron para hablar
Este jueves, Evelyn Yang decidió hacer pública su experiencia motivada por la reacción positiva de los seguidores de su esposo cada vez que hablan del autismo que padece su hijo mayor y también por la carta de una votante que agradeció a su marido por el apoyo a las emprendedoras y que la llevó a denunciar por abuso sexual a uno de los inversores de su compañía.
"Recuerdo leer esa carta y otras y decir: 'Te entiendo. Me gustaría hablar contigo y decirte cómo te entiendo. Yo también tengo mi historia'", le dijo a CNN.
Según afirmó, hasta ahora, ni siquiera sus propios padres sabían lo que le había pasado. "Hay algo sobre estar sobre el terreno en campaña, conocer a gente y ver la diferencia que puedes hacer que me ha movido a compartir mi historia sobre abuso sexual", apuntó.
Mientras CNN transmitía su historia, su esposo Andrew Yang, escribió en su cuenta de Twitter: "Amo mucho a mi esposa".
El precandidato, que este jueves compartió un mensaje en esa red social en la que le deseaba a su esposa un feliz aniversario por sus 9 años de matrimonio, publicó después un comunicado en el que dijo que se le parte el corazón cada vez que piensa en lo que tuvo que sufrir su esposa.
"Estoy sumamente orgulloso de Evelyn por contar su historia y se me rompe el corazón cada vez que pienso por lo que pasó. Ella es mi mejor amiga y la mujer más valiente que conozco", escribió. "Cuando las víctimas de abuso hacen sus casos públicos se merecen que las creamos, las apoyemos y las protejamos".
"Me agarró, me desvistió y me examinó internamente sin guantes"
Pero durante meses, Evelyn Yang sufrió el peso de haber sido víctima de una agresión sexual en soledad.
Todo empezó cuando, tras quedarse embarazada, la mujer empezó a notar situaciones extrañas en sus visitas al ginecólogo.
"Empezó por preguntas inapropiadas como qué tal era la intimidad con mi esposo, actividad sexual… preguntas inapropiadas que no tenían que ver con mi salud", recuerda Yang. Con los días, dice, los exámenes se hicieron más largos y más frecuentes, pero no fue hasta después que se dio cuenta de que todo eso era innecesario.
"Me arrepiento de haberlo soportado porque acabó en una agresión sexual indisputable", dijo conteniendo las lágrimas.
Según su relato, el peor ataque sucedió cuando estaba embarazada de 7 meses. "Estaba vestida y lista para irme y en el último minuto se inventó una excusa. Dijo algo de que quizás iba a tener que hacerme una cesárea y me agarró, me desvistió y me examinó internamente sin guantes. Y al principio, yo estaba un poco como: ¿qué está pasando aquí?", recuerda.
Evelyn Yang dice que, tras salir de la consulta del médico, decidió no regresar pero no reunió la fuerza suficiente para contárselo a su esposo porque pensaba que se culparía por no haber podido ir con ella al doctor ya que en ese momento estaba viajando mucho con la ONG con la que trabajaba. "Pensaba que podía superarlo sola", afirma.
Sin embargo, meses después recibió una carta en la que le informaban que el ginecólogo que abusó de ella había dejado la práctica. Entonces, buscó en internet y encontró que Robert Hadden había agredido sexualmente a otra mujer, que denunció ante la policía.
¨"Sentí alivio", asegura. "Finalmente me di cuenta de que no estaba sola. Me pasó, pero no fue algo que hice yo sino un depredador serial".
Entonces también buscó una abogada que descubrió que el distrito de Manhattan, el mismo que lleva el caso contra el productor de cine Harvey Weinstein, tenía un caso abierto contra Hadden y que al menos 18 mujeres más lo habían denunciado por abuso sexual.
En 2016, Robert Hadden alcanzó un acuerdo con la Fiscalía en la que se declaraba culpable de dos de los 9 cargos que se presentaron en su contra. Según CNN, las acusaciones de Yang no estaban entre ellas.
Entonces, Hadden fue registrado como acosador sexual nivel 1 (el más bajo) y se le retiró su licencia médica, pero no tuvo que ir a prisión, según informó The New York Times.
Yang cree que en su caso, como en el de las mujeres que acusaron a hombres poderosos como Jeffrey Epstein de acoso y violaciones, se le acaba negando la justicia a las víctimas.
En su caso, Yang lamenta que no pudiera hablar directamente ante el juez y que la Universidad de Columbia, donde trabajaba el doctor Hadden, "usara su influencia para protegerse a sí misma a expensas de las víctimas".
Yang se unió a una treintena de mujeres que demandaron a la universidad neoyorquina alegando que Columbia encubrió al doctor para proteger su imagen y no hizo nada después de que el médico recibiera denuncias de abuso, permitiendo así que lo siguiera haciendo, según informó The Columbia Spectator.
"Todas tienen una historia de MeToo. Es demasiado común", lamentó Yang. "Pero no todas pueden contar su historia. No todas tienen la audiencia o plataforma para hacerlo y yo siento que estoy en esta posición privilegiada para hacerlo".
Por su parte, Andrew Yang también se mostró esperanzado en que la historia de su esposa Evelyn de fuerza a otras que lo han sufrido y que "envíe un claro mensaje" de que las instituciones necesitan hacer más para "proteger y responder a las mujeres".