Cómo el coronavirus está complicando la inscripción de votantes hispanos para las elecciones de noviembre

Organizaciones cívicas se han visto obligadas a rediseñar sus campañas para inscribir a hispanos en el padrón electoral para que puedan pariticipar en las elecciones de noviembre, una labor estratégica que este año se ha complicado aún más ante la limitada interacción entre personas que ha traído consigo la nueva era covid-19.
Los hispanos llegarán a las elecciones de noviembre por primera vez como la principal minoría étnica, aunque históricamente no han logrado aprovechar ese potencial y ejercer así una mayor influencia en la política estadounidense.
Para las elecciones de mitad de período de 2018 conformaban el 11% del padrón electoral y casi una tercera parte de quienes fueron a votar eran jóvenes o personas que lo hacían por primera vez, de acuerdo con datos del Pew Research Center, algo que algunos interpretaron como una señal de la motivación para participar políticamente en la comunidad.
Sin embargo, NALEO (siglas en inglés de la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos) estima que de los 27 millones de hispanos que en 2016 reunían los requisitos para votar, apenas 13 millones acudieron a las urnas aquel noviembre.
Con ese déficit histórico de participación electoral hispana en mente, tres organizaciones consultadas por Univision Noticias. han volcado sus campañas desde marzo para darle énfasis al o con las personas a través de llamadas telefónicas, mensajes de texto y redes sociales.
Empadronamiento en tiempo de virus
Clarissa Martinez de Castro, vicepresidenta para asuntos políticos de Texas.
Martínez agregó que hasta la fecha han logrado inscribir a 60,000 votantes nuevos, en su gran mayoría antes de que las autoridades restringieran las actividades a mediados de marzo para controlar el virus.
"El coronavirus ha complicado el trabajo en más de un aspecto y al mismo tiempo ha acelerado la innovación y el uso de las nuevas tecnologías y también de las formas de comunicación tradicionales", indicó.
Martínez dijo que su equipo y la red de organizaciones comunitarias con la cual trabaja han aprovechado el uso de las nuevas tecnologías en su acercamiento con la comunidad para ampliar la conversación e ir más allá de la mera inscripción como votante.
Durante la pandemia "hemos logrado 2,500 nuevas inscripciones, que 16,000 votantes ya inscritos se comprometieran a votar y que 7,000 personas se inscribieran a votar por correo".
Sindy Benavides, presidenta de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC, por sus siglas en inglés) dijo que su organismo evaluará durante el próximo mes si mantendrá su meta de inscribir este año a 300,000 nuevos votantes hispanos, para lo cual contaban con abrir kioscos en eventos veraniegos que ahora están en duda.
"Esperamos y tenemos fe que la situación va a cambiar en el verano. Pero si no, ya estamos viendo qué podemos hacer con mensajes de texto, teléfonos, computadoras, Facebook y whatssp", indicó a Univision Noticias.
La importancia del cara a cara
Benavides expresó preocupación de que las herramientas tecnológicas no logren reemplazar apropiadamente el o directo con las personas.
"¿Va a ser sufciente? Creo que no. Tener conversaciones cara a cara y responder preguntas es muy importante. Va a hacer falta" dijo Benavides. "Si la comunidad no tiene esa información, si no saben de esas opciones, tal vez no tomen las acciones que deben en términos de votar".
El virtual candidato presidencial demócrata Joe Biden ha abogado para que se facilite el voto por correo como una opción segura que disminuye el riesgo de contagio.
Pero el presidente Donald Trump se opone rotundamente a esa posibilidad, alegando sin mostar evidencias que facilita el fraude electoral.
Héctor Sánchez Barba, presidente de Mi Familia Vota, considera que el ajuste en los planes es una "oportunidad de abrir nuevos sistemas y que nuestra gente se acostumbre a usar medios digitales para la participación cívica".
Sánchez aseguró que a raíz de la pandemia su equipo ha realizado lo que describió como una "inversión histórica y significativa" en su operación digital.
Mi Familia Vota mantiene su meta de inscribir entre 150,000 y 200,000 nuevos votantes hispanos, pero hasta la fecha solo han alcanzado un 50% del objetivo que se habían propuesto para este punto del año.
"Es importantísimo que la gente se registre porque hay demasiado en juego", dijo Sánchez. "La única manera de avanzar la agenda latina es asegurándonos de que agarramos el poder político, lo cual se consigue a través de la participación cívica".