El impactante video de regreso a clases que hicieron los padres de Sandy Hook
El regreso a la escuela es un alivio para muchos padres que ahora tendrán más tiempo libre. Pero también comienza una época de incertidumbre, ya que los tiroteos escolares son una realidad para los niños en Estados Unidos.
Los padres de las víctimas de uno de estos tiroteos, el de la primaria Sandy Hook en 2012, filmaron un video que precisamente deja en evidencia esa cruda realidad.
El video comienza como cualquier comercial de útiles para la escuela: un niño dice a cámara lo emocionado que está de recibir la mochila que quería, una "perfecta para el regreso a clases".
Luego, una niña elogia sus nuevas carpetas que la "ayudarán a mantenerme organizada". Un niño comenta cómo sus audífonos lo ayudan a estudiar, pero en el fondo se ve cómo sus compañeros salen a correr del salón y él no lo nota.
En el pasillo, otro niño habla de sus zapatos nuevos que lo ayudan a correr, escapando mientras otros hacen lo mismo y tropiezan. Una niña usa su suéter para trancar una puerta, un niño usa una patineta para romper una ventana, unos niños se preparan para defenderse con unas tijeras y lápices de colores y una niña usa su media como torniquete para un compañero que sangra herido.
La escena final, la más desgarradora, es una niña escondiéndose en el baño, llorando, diciéndole por mensaje de texto a su madre que la ama.
"Finalmente tengo mi propio teléfono para mantenerme en o con mi mamá", dice, mientras se oye que alguien entra al baño.
El video se volvió viral, ha sido retransmitido por todas las cadenas principales de noticias y lo han retuiteado varios precandidatos demócratas, como Beto O'Rourke, la senadora Elizabeth Warren, la senadora Kamala Harris, el empresario Andrew Yang, el alcalde Pete Buttigieg de South Bend, Indiana, y el gobernador de Montana Steve Bullock.
"Se supone que sea un video intenso", le dijo Nicole Hockley, directora gerente de Sandy Hook Promise, a CNN el miércoles. Su hijo, Dylan Hockley, de 6 años, murió en el tiroteo de Sandy Hook. "Esto es lo que nuestros hijos están viviendo ahora en la escuela", dijo.
Sandy Hook Promise es una organización sin ánimo de lucro formada por los padres de los niños pequeños que murieron en el tiroteo en Newtown, Connecticut, que mató a 20 estudiantes y seis adultos.
"Queríamos centrarnos en esta época del regreso a clases porque los padres todavía piensan que es un momento color de rosa en el que les compras sus grapadoras, zapatos, cuadernos y carpetas", dijo. "Mientras tanto, es una época de violencia para muchos niños", añadió.
El grupo se dedica a concientizar sobre las acciones que pueden tomar los ciudadanos para intentar cambiar las leyes de control de armas y, mientras tanto, prepararse para protegerse en caso de que el siguiente tiroteo ocurra en su escuela o en la de sus hijos.
Uno de los documentos que reparten se llama 'Conoce los signos', en el que subrayan que 80% de los atacantes en las escuelas avisaron antes de llevar a cabo el tiroteo.
El grupo busca "enseñarle a jóvenes y adultos a identificar, intervenir y ayudar a las personas ANTES de que hieran a otros o a sí mismos". También quiere enseñarle a los chicos a "minimizar el aislamiento social, la marginalización y el rechazo al crear una comunidad inclusiva que se acerque y conecte con individuos en riesgo" antes de que sea demasiado tarde.
En una investigación de un año, el diario The Washington Post descubrió que al menos 144 niños, educadores y otras personas fueron asesinados en tiroteos escolares, y otros 302 resultaron heridos.
El debate alrededor del control de armas a nivel nacional es una parte cada vez más importante en la política. Fue uno de los temas más fuertes durante el tercer debate de los precandidatos demócratas para la presidencia el jueves pasado, cuando O'Rourke, representante en el Congreso por Texas, aclaró que una de sus propuestas de hecho sí era confiscar los rifles de asalto en el país.
Estas armas, como las AR-15 y las AK-47 son las más vendidas y las más usadas en los tiroteos.
Autumn Durald Arkapaw, quien se encargó de la cinematografía del video, dijo en su cuenta de Instagram que este era "un trabajo con mucho significado que espero que marque una gran diferencia. Pongámosle un pare a esto".
Aunque todos los años, para el regreso a clases, aumentan las ventas de artículos como las mochilas a prueba de balas, Hockley le dijo al Today Show de NBC News que "nunca le pondré una mochila a prueba de balas a mi hijo. Creo que envía un mensaje totalmente equivocado: él no es un soldado yéndose a la guerra; es un niño yéndose a clase de matemáticas".
