"Rusia no interfirió en las elecciones": la mentira del año es de Trump

La plataforma de fact-checking Politifact eligió este martes la mentira de año en EEUU, y es del presidente Donald Trump, quien asegura que no hubo interferencia de Rusia en las elecciones presidenciales pasadas, pese a que múltiples agencias de inteligencia del país confirmaron que sí ocurrió.
En enero de este año, la Comunidad de Inteligencia (CI), que reúne a 17 agencias de seguridad del país, entregó un informe en el que aseguró que Rusia interfirió en el proceso electoral.
“Consideramos con alta confianza que el presidente ruso Vladimir Putin ordenó una campaña de influencia en 2016 dirigida a la campaña presidencial de EEUU, cuyos objetivos fueron socavar la fe pública en el proceso democrático de Estados Unidos, denigrar a la secretaria Clinton y dañar su elegibilidad y potencial presidencia”, señala el documento.
Según la investigación, los rusos dirigidos desde el Kremlin pagaron en redes sociales propaganda ideológica contra diversos candidatos, especialmente Clinton. También hackearon y filtraron correos electrónicos del partido demócrata, entre otras acciones. Incluso Facebook informó en septiembre que había cerrado cientos de cuentas falsas asociadas entre sí, que pagaron anuncios políticos y que operaban desde Rusia.
Pero la abundante evidencia no es obstáculo para que Donald Trump afirme que la interferencia rusa es mentira. “Esta cuestión de Rusia con Trump y Rusia es una historia inventada. Es una excusa de los demócratas por haber perdido una elección que deberían haber ganado", dijo el presidente en mayo, durante una entrevista con Lester Holt de la cadena NBC.
Nuestros colegas de Politifact –una plataforma de verificación del diario Tampa Bay Times que recibió el premio Pulitzer en 2009– consideran grave el hecho de que sea el propio presidente de EEUU el que desconozca la interferencia rusa en el país.
“Cuando el comandante en jefe de la nación se niega a reconocer una amenaza a la democracia estadounidense, hace que sea aún más difícil abordar el problema. Por esta razón, elegimos la afirmación de Trump de que la interferencia de Rusia es un engaño como nuestra Mentira del Año para 2017”, escribió la editora, Angie Drobnic Holan.
Otras falsedades
Lo de Rusia no es ni mucho menos la única mentira que ha lanzado Trump este año. Desde que inició su gobierno, el Detector de Mentiras de Univision ha verificado al menos 94 falsedades dichas por el presidente.
Una de las más significativas es su insistencia en asociar a los indocumentados con el crimen. "Mientras hablamos, estamos expulsando pandilleros, vendedores de drogas y criminales que amenazan nuestras comunidades y depredan a nuestros ciudadanos", dijo Trump en febrero ante el Congreso.
Pero, a pesar de pintar a las personas sin papeles como violentas y peligrosas, desde hace un siglo diversas investigaciones han mostrado que los inmigrantes, sin importar de donde provengan, cometen delitos en menores niveles que la gente nacida en el país .
Otra mentira de Trump fue cuando afirmó que muchos médicos estaban abandonando la profesión en Estados Unidos debido al plan de salud Obamacare. Sin embargo, los datos del Association of Medical Colleges (AAMC) muestran que el número de médicos activos en el país aumentó un 8% desde el 2010. Y la cantidad de estudiantes de Medicina alcanzó números récord y se esperaba que este año sfuesen 30% más que los matriculados hace 15 años.
En agosto, el presidente escribió que el país tenía el desempleo más bajo en 17 años y que los salarios iban creciendo. Eso es mentira. Ento ese momento la tasa de desempleo era la menor en 10 años.
En abril, Trump parecía inventar su propia fórmula para calcular el porcentaje de desempleo en Estados Unidos, al decir que habían 100 millones de personas sin trabajo y que la tasa de desempleo del Departamento de Trabajo ( eso es mentira. Los desempleados en Estados Unidos no son 100 millones, como dijo el presidente, quien incluyó en su cálculo a todo aquel que está “fuera de la fuerza laboral”: las personas jubiladas, padres que se quedan en la casa, discapacitados, estudiantes de secundaria y adultos que estudian a tiempo completo, entre otros.
El presidente incluso mintió al decir que Barack Obama y sus predecesores no llamaban a los familiares de los soldados caídos. Pero en la misma conferencia de prensa donde planteó esto, se contradijo y confesó desconocer el origen de su afirmación.