Al menos tres cohetes impactaron en la embajada de Estados Unidos en Irak, según reportes

Tres cohetes impactaron este domingo, por primera vez directamente, en la embajada de Estados Unidos en Bagdad, mientras en todo Irak miles de manifestantes antigubernamentales desafiaban a las fuerzas de seguridad, que abrieron fuego, causando dos muertos.
Una fuente del Ejército iraquí con rango dijo a la agencia Efe que al menos uno de esos cohetes cayó dentro de la legación estadounidense y dejó al menos cinco heridos, cuyas nacionalidades se desconocen.
La fuente militar agregó que tras el ataque, la seguridad de la Embajada reforzó su presencia en las inmediaciones del edificio, al tiempo que aviones de EEUU sobrevolaron durante horas la Zona Verde, donde se encuentran la mayoría de las Embajadas y las sedes gubernamentales.
Otra fuente de los servicios de seguridad dijo a la AFP que uno de los cohetes había caído sobre una cafetería de la embajada a la hora de la cena, y otros dos cayeron cerca.
Al menos una persona resultó herida en el ataque, informó a la AFP un alto cargo iraquí que pidió el anonimato. Por el momento se desconoce si la víctima es estadounidense o un trabajador iraquí.
Otros dos funcionarios estadounidenses dijeron a ABC News que el comedor de la embajada fue alcanzado directamente en el ataque del domingo. Uno de los funcionarios dijo que se dispararon un total de cinco cohetes y que tres impactaron en el complejo de la embajada.
Un portavoz del Departamento de Estado citado por CNN dijo el domingo por la tarde que "están al tanto de los informes de cohetes que aterrizan en la Zona Internacional", pero no se dirigió a la propia embajada de Estados Unidos. El Departamento de Estado no respondió a la pregunta de si algún empleado de la embajada resultó herido.
"Hacemos un llamado al Gobierno de Irak para que cumpla con sus obligaciones de proteger nuestras instalaciones diplomáticas", dijo el vocero.
En las últimas semanas la embajada de Estados Unidos, situada en la ultrasegura Zona Verde de Bagdad, y las bases iraquíes que albergan a soldados estadounidenses fueron blanco de ataques.
Numerosos proyectiles han impactado en el perímetro de la Zona Verde o en sus alrededores en las pasadas semanas, y este representa el tercer ataque desde principios de enero, en medio de una escalada de tensión entre Washington y Teherán tras la muerte del poderoso comandante iraní Qassem Soleimaní en Bagdad el día 3 de este mes.
Ninguno de ellos ha sido reivindicado, pero Washington acusa a las milicias proiraníes.
El primer ministro iraquí, Adel Abdel Mahdi, calificó de "agresión" el reciente ataque con cohetes que podría "transformar Irak en una zona de guerra".
A finales de diciembre, un subcontratista estadounidense murió en un ataque con cohete contra una base que albergaba a soldados estadounidenses en el norte de Irak.