Claudia Vázquez llegó a los EEUU indocumentada y pensó que la universidad era un sueño inalcanzable. Después de muchos años logró ajustar su estatus legal, ir a la universidad y ser la primera en su familia en recibir un título universitario. En la escuela donde enseña, Santiago Acero, ubicada en un barrio predominantemente hispano en Chicago, busca ayudar a los niños a aceptar y a conocer sus debilidades y sus fortalezas. Uno de sus objetivos es lograr que otras familias migrantes tengan la información que necesitan para que sus hijos reciban una educación de excelencia.