El negro opaca el brillo de los Globos de Oro para denunciar el acoso sexual y la desigualdad de género: "Basta de abusos"
El negro que vistieron las mujeres –y los hombres– de Hollywood dejaba muy claro que el productor acusado de abusar sexualmente de decenas de mujeres no era bienvenido en la sala. Ni él ni Kevin Spacey, ni otros hombres señalados por el mismo delito. En los premios que inauguran la temporada 2018, la industria se unió para vestirse de un solo color y enviar un mensaje: "Se acabó el tiempo de los abusos. De los silencios, de la discriminación. Time's Up".
El reclamo no se reduce al mundo del entretenimiento y el cine. Como lo explicó en la alfombra roja la actriz Sarah Jessica Parker: "Estamos pidiendo ambientes laborales seguros para todas las mujeres. E igualdad, respeto y cambios en todas las industrias". Esa evidente desigualdad también fue resaltada por Myers cuando pidió "un reconocimiento para las mujeres que este año tuvieron que trabajar más duro".
"La gente está consciente de que el poder no está balanceado y eso es algo que ocasiona abusos, incluso en nuestra propia industria, pero también en otros lugares como en el Congreso", dijo la actriz Meryl Streep que acudió a la ceremonia acompañada de Al-Jen Poo, directora de la Alianza de Trabajadoras Domésticas. "Nos sentimos incentivadas a estar juntas en una gran línea negra diciendo basta", aseguró Streep.
No fue la única mujer poderosa en ir acompañada de una activista. Laura Dern asistió junto a Mónica Ramírez, de la Alianza Nacional de Campesinas de EEUU, y Michelle Williams, entre otras, acudió con Tarana Burke, creadora del movimiento #MeToo y de la iniciativa Girls for Gender Equity.
Las historias ganadoras también exponen el abuso
La actriz Nicole Kidman recibió uno de los primeros galardones de la noche por su rol de Celeste Wright en la serie de HBO 'Big Little Lies', donde encarna a una víctima de violencia doméstica que recibe golpes y maltratos de su marido. Al recibir el galardón la actriz celebró haberse unido a otra mujer, la actriz Reese Witherspoon, para crear el proyecto y pidió mantener viva la conversación sobre el abuso.
Al recoger su premio por la misma serie, la actriz Laura Dern también habló a favor del movimiento que defiende a las mujeres: "A muchos de nosotros se nos enseñó a callar: vivíamos en una cultura del silencio (...) Enseñemos a nuestros hijos que hablar sin miedo a ser atacados es la nueva normalidad".
Otra de las actrices en hablar del tema fue Elizabeth Moss, quien fue premiada por su rol en 'El cuento de la criada', la historia basada en el libro de la escritora canadiense Margaret Atwood, una distopía que resalta los peligros inherentes de mezclar religión y política y "el empeño de todo poder absoluto de someter a las mujeres antes de sojuzgar a toda la población".
A Atwood, Moss le envió un mensaje: "Esto es por ti y todas las mujeres que vinieron antes y después de ti, que fueron lo suficientemente valientes para hablar en contra de la intolerancia y las injusticias y luchar por la igualdad y la libertad en este mundo. Ya no vivimos en los huecos, en los espacios blancos del papel, somos y escribimos la historia impresa".
El premio a la mejor película dramática fue para 'Three billboards outside Ebbing, Missouri'. La cinta cuenta la historia de una madre que meses después de la violación y asesinato de su hija decide contratar tres anuncios para acusar al sheriff del pueblo por dejación, ya que no hay ninguna persona acusada ni detenida por la muerte de la chica. La protagonista de la película, s McDormand se hizo con el Globo de Oro a mejor actriz de drama. En un discurso en el que reconoció el convulso año para las mujeres en Hollywood terminó diciendo: "Las mujeres no están hoy aquí por la comida, están aquí por su trabajo".
"Estoy especialmente orgullosa de todas aquellas mujeres que han contado sus historias", dijo Oprah al aceptar el reconocimiento Cecil B. DeMille por su trayectoria en medio de una ovación del público: es la primera mujer negra en ganarlo en toda la historia de los premios. Recordó cómo le inspiró, siendo apenas una niña, ver a Sidney Poitier ganar el Oscar en 1964. Defendió a la prensa y aseguró: "Contar nuestras historias son nuestra principal herramienta".
"Quiero darle las gracias a todas aquellas que han sido lo suficientemente fuertes y han hablado. Este año nos convertimos en la historia: pero no solo en el mundo del espectáculo, sino en una que trasciende culturas, geografías, razas, religiones, políticas y lugares de trabajo. Así que gracias a todas esas mujeres que han aguantado abusos por años porque ellas, al igual que mi madre, tenían hijos que alimentar y cuentas que pagar y sueños que cumplir. Ellas son las mujeres cuyos nombres nunca sabremos: son trabajadoras domésticas y de la agricultura y están en la ciencia, en restaurantes, en los negocios, en la tecnología, en el ejército, son atletas".
Allí Oprah recordó la historia de 'Me too' (yo también fui abusada).
En el público estaban otras mujeres promotoras de la iniciativa Time's Up, como Natalie Portman –que al momento de presentar los premios en la categoría al mejor director destacó que todos los nominados eran hombres–, America Ferrera o Salma Hayek, una de las actrices que denunció a Wenstein. "Se acabó el tiempo del silencio. Se acabó el tiempo de esperar. Se acabó el tiempo de tolerar la discriminación, el acoso y el abuso. Queremos que todos los sobrevivientes de abuso sexual sean escuchados, que les crean. Y saber que la rendición de cuentas es posible". Ese es uno de los mensajes de la plataforma que ya está cerca de llegar a la meta de recaudación de 16 millones de dólares, para ofrecer asistencia legal a todas aquellas mujeres que no tienen cómo defenderse.
Además fue Barbra Streisand la escogida para presentar el premio a mejor película. Es la única mujer que ha ganado un Globo de Oro a mejor dirección, fue en 1984, por 'Yentl'. Como explicó la actriz y cantante aquello fue hace mucho tiempo, "han pasado 34 años, se acabó el tiempo (time's up)". Incluso Gena Davis y Susan Sarandon hicieron una aparición estelar rememorando el dúo Thelma y Louise, que retrató la furia y el hartazgo de las mujeres ante el abuso. Presentaban el premio a mejor actor y Davis sugirió que los hombres nominados en esa categoría podían repartir la mitad de su sueldo con sus compañeras, y así estarían en paz.
A pesar de los discursos que hicieron mención al problema en Hollywood este domingo por la noche, ninguno se destacó por ser lo suficientemente contundente en contra de Weinstein y otros hombres poderosos de la industria, tomando en cuenta la cantidad de mujeres que han compartido sus escalofriantes historias de abusos.