Tu hijo podría ser alérgico a la proteína de leche de vaca: 8 señales lo indican
Tu bebé ya cumplió un añito y su pediatra ahora te permite darle leche de vaca. Como todo alimento nuevo que se introduce en la dieta del bebé, tienes que estar atenta a los posibles efectos secundarios que pueden aparecer.
La leche de vaca no le sienta bien a todas las personas y muchas son alérgicas a cierto tipo de compuestos que conforman las proteínas de la leche. En términos académicos, su sistema inmune tiene una reacción anormal a dichos compuestos cuando beben leche.
Para saber a qué atenerte, te vamos a contar cuáles son las principales señales que indicarían que tu hijo puede tener alergia a las proteínas de la leche de vaca y cómo es el tratamiento, ¡sigue leyendo!
Signos y síntomas de alergia a la proteína de la leche de vaca
Antes de detallar los síntomas que este trastorno presenta, cabe destacar que esta alergia puede dividirse en dos tipos diferentes: en la primera, la intolerancia por reacción inmediata, los síntomas se desarrollan durante las primeras dos horas luego de consumido el producto. En la segunda, aquella que tiene reacción tardía, puede demorar entre 48 horas y una semana en manifestarse.
Los síntomas que podrían indicar que el niño es intolerante a las proteínas de la leche de vaca incluyen:
- incremento del cansancio,
- letargo,
- fiebre,
- vómitos intensos,
- diarrea,
- intolerancia a cualquier tipo de alimento,
- pérdida de peso,
- sangre en las heces.
Tratamiento para la alergia a la leche de vaca
Si notas los síntomas, lleva a tu hijo al pediatra lo antes posible. Es muy importante que el médico sepa absolutamente todo para poder hacer un diagnóstico certero. Inclusive pueden ser muy útiles los antecedentes familiares de alergias de cualquier tipo, no solo las alimentarias.
En caso de sospecha de que tu hijo pudiera tener esta alergia, se aconseja que deje de consumir cualquier tipo de lácteos y sus derivados además de aquellos productos que contengan soja. Tampoco es aconsejable reemplazar la leche de vaca por leche de cabra o de oveja, pues las proteínas se encuentran también allí.
Los niños con alergia a las proteínas de la leche de vaca necesitan consumir fórmulas hidrolizadas compuestas por proteínas degradadas. Estas son de fácil digestión y puede consumirlas sin temor a sufrir de alguno de los molestos síntomas que esta enfermedad conlleva.
Este tipo de fórmulas funciona en una amplia mayoría de pacientes llegando al 90 % de efectividad. El resto deberá consumir fórmulas basadas en aminoácidos que contienen los componentes básicos de las proteínas.
¿Se cura?
Por fortuna, esta alergia alimentaria se cura en el 90 % de los niños antes de los 6 años de vida y la mitad de los bebés antes de cumplir un año ya estarán curados.