La actriz reveló en entrevista con los medios de comunicación mexicanos, que su hija Ana Sofía sufrió bullying cuando en la escuela descubrieron que era adoptada: "Alguien se enteró en el salón que Ana Sofía era adoptada: '¿cómo, eres adoptada?, ¿no tienes mamá?, híjole, qué mala onda', empezaron (a decir) todas las criaturas. Y le dije a Ana Sofía: '¿y qué te pasó?' y me dijo: 'no nada, nada más me quedé callada, no me importó'", según reportó Mezcalent. Crédito: Instagram @laurafloresmx
Laura le aconsejó a su hija que se defienda: "A la otra le contestas, lo que le tienes que decir a esa niña es: 'híjole, te falta tanto por aprender, si vieras qué padre es ser adoptado porque tú no tuviste opción, porque tus papás te tuvieron y ya, pero yo tuve una bendición de Dios bien padre, y de verdad te invito a que aprendas más'", dijo en la entrevista. Instagram @laurafloresmx
La también cantante siempre les ha dicho la verdad de su origen: "Mis hijos desde el día uno saben que son adoptados y saben cuál es su realidad, me han preguntado '¿dónde están mis papás?', les digo: 'no lo sé, ustedes son niños expósitos', esa es la traducción legal a la palabra abandono", señaló. Instagram @laurafloresmx
Para evitar que los niños pasen por ese señalamiento, la actriz exhortó a los papás a hablar de frente con sus hijos: "Por favor, padres adoptivos, díganles la verdad, no esperen el momento adecuado para hacerles la confesión. Desde el día uno: 'no, no naciste de mi panza, ¿cuál es el problema?, naciste de mi corazón'", dijo para los micrófonos de Mezcalent. Crédito: Instagram @laurafloresmx
Laura tuvo muchos problemas para convertirse en madre, perdió un bebé y fue a través de inseminación artificial que pudo tener a María en 1999. En esta imagen, que Flores compartió en Instagram, recordó que su primera hija nació prematura y mientras ella se recuperaba de un edema pulmonar. Crédito: Instagram @laurafloresmx
Después del nacimiento de María, Laura sufrió la pérdida de dos bebés más. Uno de ellos a las siete semanas de embarazo, cuando grababa 'Siempre te amaré' (2000), y el otro cuando tenía 5 meses de embarazo y a quien decidió bautizar como José María: "Fue horrible, es una experiencia que no se la deseo a nadie. Era niño y venía con síndrome de Down", dijo para Don Francisco. Mezcalent.com
