Un oficial que custodia la Plaza Tiananmen de la capital de China lleva una máscara para protegerse de la contaminación, tan densa que apenas deja ver el retrato de Mao Zedong en el fondo. Al menos 23 ciudades se han visto obligadas a decretar una alerta roja debido a la mala calidad del aire. Crédito: Jason Lee/Reuters
Un grupo de mujeres cruza la calle cubierta de contaminación en Shenfang, en la provincia de Hebei. Una de las principales razones por la que las ciudades chinas viven episodios de fuerte contaminación es el uso de carbón para la producción de la calefacción y luz artificial en áreas públicas. Crédito: Damir Sagolj/Reuters
Una acera por donde transita un grupo de peatones está totalmente cubierta de humo en Dalian, ciudad al norte de China. Otra de las más afectadas es Tianjin, a unas 85 millas (140 km) de la capital, donde en la mañana del lunes se vieron obligados a cancelar cerca de 180 vuelos y otros 60 fueron retrasados, según informó AFP. Crédito: Getty Images
La nube es tan densa que es difícil ver incluso los grandes edificios característicos de la ciudad, como la Ciudad Perdida, zona histórica de Pekín que apenas se puede ver por la cantidad de contaminación. Las autoridades han llegado impedir el paso a vehículos en determinadas áreas ante el peligro de accidente. Crédito: Wang Zao/Getty Images
Pese a que el lunes la calidad del aire había mejorado, los datos muestran que el nivel de exposición a partículas microscópicas que pueden causar problemas de salud es ocho veces más elevado que el recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Crédito: Wang Zao/Getty Images